EL Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía daba ayer en Almería luz verde a un amplio conjunto de medidas de impulso económico, -por valor de 1.374,06 millones de euros, 247 para Almería-, destinadas a favorecer la actividad, la liquidez y apoyar a la renta familiar. Este grupo de iniciativas de reactivación, que se suma al aprobado el pasado mes de febrero, se centra especialmente en los ámbitos fiscal, del empleo, el apoyo a las empresas y las familias, la modernización tecnológica, la salud, la educación, la vivienda y las obras públicas.A la inversión prevista se añadirán los 3.500 millones de euros en recursos procedentes de la estimación de las medidas de liquidez y los 1.800 millones que supondrá en Andalucía del plan recientemente aprobado por el Gobierno Central. Se trata de medidas para acelerar la ejecución de inversiones y programas previstos; dinamizar el subsector de la construcción; favorecer la liquidez; incidir en el control de la inflación; apoyo a la renta de las familias y rearsobción de trabajadores en paro en el mercado laboral. La apuesta busca, en palabras del presidente de la Junta de Andalucía, hacer frente a la desaceleración económica que vive el país, con datos "malos" como los del paro que la confirman. A pesar de los nubarrones, la administración andaluza tiende un camino hacia el optimismo, asegura que el proceso será corto -situando en finales de 2009 el inicio de la recuperación de la senda del 3% de crecimiento- y para ello refuerza licitación de obra pública (la comunidad en la que más ha crecido en los últimos meses) y apunta a la aceleración de planes tan importantes como el PISTA, que pretende en los próximos diez años situar a la Comunidad en la vanguardia en infraestructuras y comunicaciones. Un guiño al optimismo pese al pesimismo general, que la Junta pretende liderar con medidas concretas en sectores clave en economía. Ahora falta conocer cómo va a ser recibido por los mercados y que confianza es capaz de generar.