DECÍA Paco Herrera que una vez conseguida la permanencia había que ir a por el ascenso.

Por una sencilla razón, porque en la división de plata no hay ni Intertoto, ni UEFA ni ningún premio intermedio. Lo dijo y el equipo terminó luchando hasta la penúltima jornada para salvarse matemáticamente, como siempre en el Poli Ejido.

Pero su frase era acertada y podemos aplicarla al Almería de primera. Ya sé que el objetivo es la permanencia, ya sé que todo lo que venga más es un regalo, por tanto, no es meterse ningún tipo de presión. Es simplemente no relajarse y mirar los puestos europeos mientras las matemáticas no digan lo contrario como un reto.

Hay que disfrutar en estas últimas jornadas pero es posible el sueño a día de hoy y hay que seguir peleando cada partido como si de una final se tratase porque lo de la UEFA sería la releche, me suena a música celestial.

Y el retraso de la decisión de Emery, centrarse en el próximo partido, puede ser el mejor síntoma.

En el momento que el tema sea el futuro del míster y de los jugadores, alguno bajará la guardia, si entramos en las rotaciones y en dar descanso a los titulares también el mensaje será claro así que hay que seguir siendo lo más competitivo posible y soñar, que no cuesta.