Y a usted, ¿le atienden?

Pedro Caballero / Infante / Caballeroinf@hotmail.com

El algodón no engaña

NO es que Don José sea políglota, dialectólogo o intérprete, que también, sino porque era conocedor de que Junquillo, el pitingo gitano, sufre de una epicondilitis; el llamado coloquialmente codo de tenista, diagnóstico que hizo exclamar al caló:

-¿Tenista?...tié güevo la cosa. Yo no ha cogío en mi vía una rasqueta ni la de matá mosca.

De esta forma, cuando el gitanito ha entrado en la Farmacia diciendo:

-Me han metío una inyesión por dentro que me ha reventao er doló entero.

El boticario le responde:

-Pero no creas que con una infiltración te han quitado el problema.

José Joaquín llevaba tiempo pidiéndole de forma reiterada "pastilla pal doló" y como Don José había pasado el nivel de los analgésicos que debe dispensar sin receta, habló con un amigo traumatólogo que lo ha sometido a una infiltración; sistema mágico, pero temporal, para acabar con los dolores articulares.

Hoy, por el contrario, el farmacéutico ha entrado al trapo al oír un diálogo incorrecto que puede traer aparejada la mala interpretación de un tema culinario y también sanitario.

-¿Vé tú niña lo que yo te desía der girasó? ¡De aseite de semilla!

Conchi se está refiriendo a la alarma que han disparado desde el Ministerio de Sanidad poniendo en alerta a los consumidores sobre una determinada partida de aceite de girasol que, importada desde Ucrania, puede producir alteraciones en la salud de quien la consuma.

-El que sea de semilla no tiene que ver nada con su calidad alimentaria sino que, al parecer, esta partida lleva incorporado unos elementos tóxicos.

Como los medicamentos entran dentro de la denominada bolsa de la compra, los temas de mercado forman parte del consejo farmacéutico cosa muy coherente, aunque no prevista, ya que los estudios de Farmacia llevan incorporadas docencias como Bromatología, Dietética y Nutrición.

- yo lo vengo avisando. Lo que te ahorra en comé te lo gasta en botica. Los aseite de semilla ni las lamparilla der día de los difunto.

Don José pone el paño en el púlpito y explica, con detalle, que una cosa es la bondad de la dieta mediterránea, con el incomparable aceite de oliva, y otra denostar contra los muchos aceites de semillas comestibles que cumplen perfectamente con su función gastronómica.

-Pero, ¿hay más aseite de esto?

-Aceites de semilla los hay no sólo de girasol, sino de soja, de cacahuete, de pepita de uva y hasta de algodón

-¿De argodón?. ¡Anda usté ya con er cachondeo!

-Te estoy diciendo la verdad.

-¡Vamo allá!. ¡Que me voy yo a creé que del argodón sale aseite…!

El boticario ha de ponerse muy serio y decir que la palabra algodón no está sólo referida a la conocida pelusa blanca y suave que recubre la planta, sino al conjunto de ésta, donde está incluida la semilla.

-¡Que cosas niña! ¿Tú te lo cree?

-El argodón no engaña. Eso te dijo er prasticante la úrtima vé que te puso una inyesión.

-¿Qué me dijo?

-Dijo que paresía que le había pinchao a Fray Escoba de cómo se lo había dejao de negro despué de restregarte el arcó.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios