EL 13 de septiembre de 1931 el tranquilo pueblo almeriense de Santa Fé de Mondújar se sacudió por un tremendo crimen de graves connotaciones políticas y de orden público. El alcalde accidental del municipio, el líder radical socialista Juan Díaz Gonzálvez, mató de tres disparos de escopeta a un muchacho que contaba con apenas 23 años, Manuel Ortega López, cuando éste defendió a su padre en la pelea que mantenía en un bar de la localidad con el regidor.

Definido como el cacique del pueblo, Juan Díaz Gonzálvez, disparó esa noche tres veces contra Manuel Ortega, causándole unas heridas de tal gravedad que falleció a los pocos días en la Clínica Monroy de la capital. No contento con ello, el agresor también disparó contra el tabernero, Francisco López Giner, aunque su mala puntería salvó la vida del hostelero.

Previamente, el alcalde accidental y el padre de la víctima, Manuel Ortega Gonzálvez, se habían enzarzado en una pelea en el establecimiento público. Aunque eran parientes, desde las elecciones municipales que tuvieron lugar el 12 de abril de 1931 ambos se habían distanciado, porque los comicios provocaron un cambio en el Ayuntamiento y sus enfrentamientos ideológicos los llevaron ese día a las manos.

Manuel, padre, abofeteó a Juan y lo tiró a un sofá que había en el bar. Esa fue la sentencia de muerte del joven Manuel Ortega ya que cuando éste quiso levantarlo el agresor sacó su pistola y le disparó cobardemente.

Diario de Almería relataba así el suceso a sus lectores, el 16 de septiembre de 1931: "La opinión pública de este tranquilo y pacífico pueblo se muestra unánime en condenar el hecho realizado por el alcalde accidental, Juan Díaz Gonzálvez, en la persona del joven Manuel Ortega López. Éste había ido desde la finca "La Calderona" a recoger a su padre, cuando se encontró que este discutía con el cacique del pueblo.

La conducta del agresor es bien conocida en todo el pueblo y como datos interesantes hemos de hacer resaltar que fue el jefe de los albiñanistas (seguidor del fundador del Partido Nacionalista Español, Jose María Albiñana Sanz) en la época de Berenguer y en la actualidad es el jefe de los radicales socialistas.

Lo cierto es que los disparos que atravesaron el cuerpo de Manuel le costaron la vida. Los intentos por salvársela en la Clínica Médico-Quirúrgica del prestigioso doctor José Sobaco Monroy, en la calle Alcalde Muñoz de la capital, no fructificaron y el joven murió a las doce de la mañana del 15 de septiembre.

El entierro fue en el municipio de Santa Fé a las cinco y media de la tarde y a las honras fúnebres acudieron casi todos los vecinos del pueblo "como último tributo a la memoria del desgraciado joven Manuel Ortega y como protesta del crimen del que fue víctima", según relataron los periódicos de la época. La presidencia del duelo la formaron, según esas mismas fuentes, Andrés Grau, Juan Molina, José Sánchez Picón, Francisco Martínez y Manuel Fontela.