El éxito de esta primera edición del Festival Internacional de Cine de Almería que acabamos de celebrar no hay que atribuírselo al Ayuntamiento, a la Diputación o a la organización interna del Festival. Aunque estos factores han contribuido de modo decisivo al magnífico desarrollo de todas las actividades programadas, creo que es justo decir que el éxito de este gran Festival se ha debido al apoyo constante, a la ilusión y el cariño que la sociedad almeriense en su conjunto ha mostrado por este evento.

Me ha llenado de alegría ver la gran afluencia de público almeriense que han tenido las galas, las proyecciones, los conciertos y las conferencias programadas con motivo del Festival, demostrando así el interés y el cariño con el que los almerienses han seguido un acontecimiento que entienden ya como suyo y al que cada año esperan con más impaciencia. Mi agradecimiento a todos aquellos que, desde sus diferentes responsabilidades, han sumado su esfuerzo para un éxito que tiene un admirable carácter colectivo.

Si hace quince años este Festival nacía con el propósito de hacer resurgir la época dorada del Cine en Almería y que renacieran los vínculos que siempre han existido, a día de hoy podemos asegurar que se ha conseguido el objetivo. Así lo demuestra el hecho de que durante todo el año sean constantes las noticias de nuevos rodajes y nuevas producciones que eligen Almería como escenario. Pero sería un error considerar este tipo de convocatorias un simple acontecimiento cultural o social. Y aunque sin duda eso también es muy importante, desde las administraciones interpretamos este acontecimiento como una palanca de creación de empleo, riqueza y fomento de la industria cinematográfica en nuestra provincia.

Pero no sólo eso. Que Almería vuelva a ser foco de atención del cine y los medios de comunicación de todo el mundo a raíz de nuevos rodajes y de presencias estelares tiene efectos de rápida traducción en otra de nuestras industrias básicas: el turismo. Fomentar las potencialidades de cualquier sector almeriense para generar escenarios de creación de riqueza, empleo y oportunidades para cada vez más gente es cumplir con nuestro papel institucional. Ayuntamiento y Diputación alcanzaremos nuestro mejor registro cuanto más nos apliquemos en cumplir con nuestra parte de la historia. No habrá final más feliz para este Festival que saber que el del año próximo será aún mejor que éste.