Tribuna

Coronel Javier Soriano

Subdelegado de Defensa en Almería

La isla militar de Terreros

Estas dos islas de origen volcánico, cercanas a la costa, presentan en su superficie escasa vegetación, pero tienen gran importancia ecológica

La isla militar de Terreros La isla militar de Terreros

La isla militar de Terreros

En el levante almeriense, en el límite con la provincia de Murcia y frente a San Juan de Terreros, en el término municipal de Pulpí, se encuentra la isla de Terreros y próxima a ella, isla Negra.

Estas dos islas de origen volcánico, cercanas a la costa, presentan en su superficie escasa vegetación, pero tienen gran importancia ecológica por la variedad de aves marinas que encuentran en ellas un lugar de asentamiento y reproducción. De hecho, la isla de Terreros, por ser de mayores dimensiones y estar situada más lejos de la costa, alberga la comunidad más importante de aves marinas que nidifican en la provincia de Almería. Entre ellas, destacan especies amenazadas como la pardela cenicienta, que sólo va a tierra para criar, o el paíño común. Otras especies de interés son la gaviota patiamarilla, la garceta común y la garcilla bueyera, así como el vencejo pálido entre las aves propiamente terrestres. Sus fondos marinos también son de gran riqueza por sus extensas praderas de una planta exclusiva del litoral mediterráneo denominada Posidonea oceánica, que sirve de refugio, alimento y reproducción de numerosas especies de peces, crustáceos, cefalópodos e invertebrados marinos. Y alrededor de la misma también existen importantes caladeros pesqueros.

El espacio natural de la isla de Terreros está declarado por el Estado como zona LIG (Lugar de Interés Geológico), y junto con el de la isla de las Palomas en Murcia, como Zona de Especial Protección para las Aves en aguas marinas españolas (ZEPA ES0000507 - Espacio marino de los islotes litorales de Murcia y Almería); así mismo la Junta de Andalucía lo ha declarado Monumento Natural.

Pero pocos saben que la isla de Terreros está afectada al Ministerio de Defensa desde el 2 de diciembre de 1971, e incluida actualmente en la relación de propiedades del Sistema de Gestión de Infraestructura de Defensa. En su día, la División de Estrategia del Estado Mayor de la Armada consideró que estaba en "Zona de Ejercicios Submarinos y Antisubmarinos de las Fuerzas Aeronavales", razón por la que la Dirección General de Patrimonio del Estado inició el proceso de afectación a la Armada, llevándose a cabo esta en la fecha ya citada. Dicha isla también ha servido para que determinadas Unidades pudieran realizar actividades subacuáticas, tanto de la Armada como del Ejército de Tierra. De este último Ejército, el espacio natural de esta isla ha sido utilizado por la Escuela Militar de Montaña y Operaciones Especiales en la fase de agua de los cursos de Operaciones Especiales, y por Unidades de los Grupos de Operaciones Especiales de Alicante.

Por su situación a la entrada de una zona estratégica como es el Estrecho de Gibraltar, el espacio natural de esta isla ha tenido un alto valor para los submarinos como zona de fondeadero, por la gran ventaja de la posible invisibilidad ante la proximidad de la costa y por la cercanía a las rutas de navegación internacionales.

El compromiso que mantiene el Ministerio de Defensa con la salvaguardia del medio ambiente es uno de los hitos destacables de su política, convirtiendo a España en la nación de la Unión Europea que tiene más instalaciones militares con un Sistema de Gestión Ambiental implementado, y con un porcentaje significativo (el 26%) del total de la superficie que gestiona integrado en la Red Natura 2000, lo cual es reflejo del interés en el cuidado y protección del rico patrimonio natural español afectado a Defensa. En 2006 el propio Ministerio publicó el libro "Espacios Naturales del Ministerio de Defensa" y en 2008 el libro "La Red Natura 2000 en el Ministerio de Defensa" para dar a conocer la valiosa muestra de la diversidad de la flora, de la fauna y, en general, de los ecosistemas españoles que están presentes en los enclaves que actualmente tienen un uso militar.

Es evidente que para el desarrollo de las actividades de Defensa se necesitan amplios espacios naturales, dada la singularidad de estas actividades, que además requieren una serie de requisitos como son la accesibilidad pública limitada, ubicaciones singulares, amplios ejemplos de paisajes y sistemas naturales, etc… convirtiendo a estos lugares con el tiempo en excepcionales reservas de biodiversidad. Sin duda alguna, la presencia militar se ha convertido en una garantía para la conservación de la flora y fauna en diferentes lugares del territorio nacional, siendo la isla de Terreros un ejemplo de ello.

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