Uno de los principales objetivos de la Diputación Provincial desde el inicio de la pasada legislatura (2011-2015) ha sido luchar contra el déficit hídrico que sufre la provincia, una batalla centrada principalmente en los pueblos más pequeños que han tenido que recurrir en pleno siglo XXI a las cubas para garantizar el abastecimiento de sus vecinos. No es muy lejana en el tiempo el camión de agua potable en la plaza de Benizalón para saciar la sed e sus vecinos y que tras un par de sondeos y potabilizadoras ya es cosa del pasado.

Ahora, seis años más tarde desde que Gabriel Amat se convirtiese en el presidente de la Institución Supramunicipal, el balance es "muy positivo", asegura el responsable político. Durante ese periodo se han invertido más de 25,1 millones de euros en obras hídricas, con fondos propios y también con los provenientes de Europa, los conocidos como FEDER, planteando soluciones a buena parte de los problemas no resueltos por el desarrollo del Programa AGUA de Acuamed.

Una hoja de ruta marcada concienzudamente en la que se ha primado por encima del resto de obras la puesta en marcha de proyectos de abastecimiento y saneamiento tan relevantes por ejemplo como el sondeo de La Calderona en la comarca del Bajo Andarax o el de Vícar para buscar recursos en sierra de Gádor. A día de hoy ambos ya son una realidad pero "aún queda mucho por hacer", aseguran fuente de la Diputación Provincial.

Una de las principales demandas de los ayuntamientos ha sido poner en marcha potabilizadoras que en estos últimos años fueron construidas por la Junta de Andalucía "pero cuyo funcionamiento era deficiente y se tuvo que realizar una serie de inversiones para ponerlas en marcha", apuntan desde la Diputación Provincial.

En este apartado, el ente supramunicipal ha destinado en los primeros años de mandato un montante de 543.414 euros en los que se incluye también la puesta en marcha de nuevas potabilizadoras. Concretamente, en conjunto, son siete y corresponden a: Bédar (50.000 euros), Alicún (66.232), Somontín (126.200), Benizalón (80.000), Almocaizar en Los Gallardos (33.211) y Fuente La Higuera también en Benizalón (66.500).

Otra de las partidas que han contado también con una importante inyección económica en la anterior legislatura, según los datos que ha suministrado el departamento de Comunicación a Diario de Almería, son los sondeos con 1,246 millones de euros.

En total han sido más de una decena los municipios que se han beneficiado de estas actuaciones concretas para buscar agua para el consumo humano: Chercos (36.000 euros), Velefique (61.200), Sorbas (80.000), Tahal (45.000), Aulago (Gérgal, 83.900), Olula de Castro (82.500), Laroya (89.912), Benizalón (301.209), Benitagla (23.300), Bajo Andarax (170.500), Fuente Victoria (Fondón, 72.380), Vícar (sondeo, 168.000; y reperforación, 86.000).

La Diputación Provincial también ha acometido obras de reparación en varias depuradoras como las de Antas y Tabernas y ha construidos nuevas en la barriada de Limara en Arboleas, en Huéchar (Alhama de Almería), y en Tallón (Olula de Castro). En este apartado la inversión asciende a 545.609 euros que se desglosan en 169.655 en Antas, 220.100 en Arboleas, 60.000 en Alhama, 36.000 en Olula de Castro y 59.853 en Tabernas.

En el periodo 2011-2015 también se han realizado inversiones directas en materia de agua con una inversión de 292.490 euros. Subvenciones a aquellos municipios que han tenido problemas en la red de abastecimiento y que también superan la decena, entre ellos, Abla, Abrucena, Alboloduy, Alcolea, Alcontar, Alcudia, Alsodux, Bacares, Cuevas del Almanzora, Chercos, Felix, Fondón, Huécija, Íllar, Lubrín, Olula de Castro, Padules, Partaloa, Santa Cruz de Marchema, Senés, Somontín, Tabernas, Taberno, Terque, Las Tres Villas, Turrillas y Vera.

Las dos partidas más importantes en cuanto a inversiones con 6,4 millones y 3,3 pertenecen a obras de diversa índole en lo que concierne a abastecimiento en un caso y a saneamiento en otro.

En las primeras, desde Diputación informan que las inversiones han llegado a la mayoría de los 103 municipios y que han consistido en la mejora de rede del ciclo del agua, la instalación de telemandos en los sondeos municipales, mejoras energéticas en captaciones de agua, mejora en conducciones a depósitos, instalación de contadores, electrificación de sondeos, reparación de depósitos, instrumentalización para el control de fugas, etc.

En cuanto a las segundas, se han cubierto las necesidades en saneamiento de los municipios con la instalación de telemandos, acometidas eléctricas, acondicionamiento de accesos a estaciones depuradoras de aguas residuales (EDAR), construcción de colectores de saneamiento, etc.