Varias calles de Aguadulce Norte acaban de entrar en una de las obras más esperadas por muchos vecinos que, además, vendrán a responder a la mejora de parte de los servicios más básicos de cualquier núcleo: el alcantarillado, asfaltado y acerado. Estos elementos serán los que más beneficiados salgan de las obras que se acometen en una veintena de vías gracias a la inyección económica de los Planes Provinciales.

El proyecto 'Mejoras en la Red Viaria en Aguadulce Norte', que se financiará con cargo a las anualidades 2016 y 2017, fue adjudicado en el pasado mes de febrero con un presupuesto total de 1.118.570,81 euros que se financia entre la Institución Provincial (25%) y el Ayuntamiento de Roquetas de Mar (75%). Gracias a la medida que puso en marcha el equipo de Gobierno de la Diputación Provincial de computar las bajas en el proceso de adjudicación, el Ayuntamiento se ahorrará 262.864 euros.

Se actuará sobre todo en el alcantarillado, acerado, iluminación y asfaltado de las vías

En concreto, estas actuaciones tienen como objetivo renovar aquellas infraestructuras que en la actualidad se encuentran obsoletas y no prestan un servicio adecuado a los vecinos; así como mejorar la accesibilidad mediante la adecuación de las aceras para el correcto uso a personas con movilidad reducida, y el refuerzo del firme de las calzadas existentes, con el fin de conferir una rodadura cómoda a las calles que se van a tratar.

Las obras se van a acometer en las siguientes calles, ubicadas todas en la zona Norte de Aguadulce: Nebraska, Alaska, Florida, Sonora, Geranio, Gladiolo, Los Girasoles, Pasadena, México, Santa Fe, Canadá, San Luis, Galán, Texas, El Rancho, Detroit, Miami, Sacramento, Dallas y Búfalo.

Dentro de las calles en las que se van a actuar se diferencian dos tipos principales de actuaciones, aquellas relativas a la mejora del pavimento del tráfico rodado y aquellas en la que se renuevan prácticamente todas las infraestructuras de las calles.

La importancia de estos trabajos radica en que van a permitir mejorar, por un lado, la estética urbana de 20 calles, así como el servicio a miles de vecinos que circulan a diario por ellas, al tiempo que se fomenta la accesibilidad para personas con movilidad reducida. No en vano, muchas de las actuaciones previstas en esta barriada roquetera vendrán también a eliminar barreras arquitectónicas que impedía el desplazamiento de todos los ciudadanos en igualdad de condiciones. Además, en determinados casos se va a ampliar la anchura del acerado, además de homogenizar las baldosas utilizadas en estas vías. En algunas vías también se actuará sobre los pluviales, saneamiento y abastecimiento.

Gracias a esta actuación, según resaltaron desde la Diputación Provincial en la presentación de l proyecto hace unos meses, se van a evitar las consecuencias que produce un mal mantenimiento de la vía.

De esta forma, hasta el momento, con estas calles en mal estado había más riesgo de sufrir accidentes de tráfico por los usuarios, derivado de la exigencia de mayor nivel de concentración en la conducción por la necesidad de prestar más atención al pavimento o acerado, con el consiguiente aumento del cansancio y la pérdida de percepción respecto de las circunstancias del tráfico, la vía y la señalización.

Igualmente, el deterioro de las vías supone un aumento exponencial de los costes de reparación en el tiempo. En concreto, se calcula que cada euro no invertido a tiempo en mejora de firmes se transforma en 5 euros a los tres años y en 25 euros a partir del quinto.

También se insiste en que, con esta actuación, disminurán los costes de mantenimiento de los vehículos y, además, de las emisiones contaminantes.