Javi Navarro trabajó ayer con el grupo haciendo el entrenamiento completo, aunque, según matizó el cuerpo médico, dentro del trabajo que realiza de readaptación. El capitán, que no juega un partido desde la final de Copa del Rey ante el Getafe en 2007, sigue su particular batalla contra su rodilla con la clara intención de volver a los terrenos de juego, aunque siempre teniendo claro que desea hacerlo en plenitud de condiciones y no por el simple hecho de volver a calzarse unas botas. Javi Navarro es, con diferencia, el que más fe está teniendo en su recuperación, pues hay versiones que aseguran que incluso ha llegado a desafiar a médicos que se ha encontrado en su camino que le han animado a claudicar.

En este sentido, el bravo defensa sevillista está más cerca de su objetivo, aunque, según lo que comentó Adolfo Muñoz la semana pasada, aún no hay fecha y ni siquiera certeza de una hipotética reaparición. Javi Navarro trabaja junto al recuperador Sergio Domínguez en torno a ocho horas diarias con la idea metida en la cabeza de volver en una batalla que cuenta con otro enemigo más, el tiempo. El capitán sevillista, que renovó en el verano precisamente del 2007 -posiblemente con cláusulas que tienen que ver con su estado físico-, termina su contrato al final de la presente temporada.