El Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha dictaminado que es legal que el Ministerio de Cultura obligue a las cadenas españolas de televisión a dedicar el 5% de sus ingresos a la financiación de película. La sentencia también respalda la normativa comunitaria de imponer que el 60% de dicho 5% se destine forzosamente a la producción de obras cuya lengua original sea cualquiera de las lenguas oficiales de España.

El ministro de Cultura, César Antonio Molina, reaccionaba ayer subrayando que es "justo y necesario" se vean obligadas a esa inversión. Considera que la media "no va contra nada ni nadie", pero que ayuda a la industria cultural. Molina agrega que esta normativa obliga a que "las cadenas privadas, deben tener un servicio público, aunque sea mínimo".

El dictamen respondía a un recurso interpuesto por el organismo que engloba a las privadas, UTECA, aunque también las cadenas públicas están obligadas a dicha inversión. Uteca se había dirigido al Tribunal Supremo, que a su vez se dirigió a la magistratura europea.