Toros

Buenas maneras del novillero de La Puebla del Río Daniel de la Fuente

  • Al término del festejo, el jurado decidió que los cuatro finalistas del próximo jueves son Daniel de la Fuente, Rocío Romero, Manuel Diosleguarde y Francisco de Miguel

La tercera novillada del XXXII Ciclo de promoción de nuevos valores de la torería se saldó con el triunfo de Daniel de la Fuente, único espada que cortó una oreja, en un espectáculo en el que se lidió una novillada de Cayetano Muñoz, en conjunto bien presentada y de juego desigual.

Daniel de la Fuente, de la Escuela de Tauromaquia de Sevilla, apuntó buenas maneras en una faena que caló mucho en el público -estuvo muy arropado por un gran número de paisanos-, con varios pasajes en los que el viento molestó. El cigarrero comenzó con unos doblones y descolló fundamentalmente en una serie diestra en los medios y un epílogo con unos bellos ayudados ante un eral pronto, manejable y que se rajó. Se entregó en la suerte suprema y enterró la espada, pero el novillo, encastado, tardó mucho en caer. Cobró un trofeo tras un aviso.

El sevillano Rodrigo Pipio, quien se está formando bajo la tutela del torero Rafael Torres, sufrió un varetazo y un par de duras volteretas por un novillo pegajoso, complicado, al que había recibido con una larga cambiada de rodillas frente a toriles. Faltó limpieza en el trasteo y mató certeramente.

El madrileño Alfonso Ortiz, de la Fundación El Juli, decidido y con oficio, lanceó bien a la verónica y cumplió en un trasteo correcto con un animal mugidor y que se quedaba corto. Mal con la espada.

El albacetense José Fernando Molina, alumno de la Escuela taurina de su ciudad, anduvo voluntarioso en una faena variada -intercaló una arrucina, un par de falleros y cerró con manoletinas- ante un eral manso, con movilidad y sin clase.

El mexicano Alejandro Adame, hermano de los matadores de toros Joselito y Luis David Adame, recibió al quinto con una larga de rodillas a portagayola. Se mostró variado con el capote. La labor, que brindó a Morante, no llegó a cobrar altos vuelos y precisó del verduguillo tras una estocada caída.

El malagueño Álvaro Passalacqua, de la Escuela de la Diputación de Málaga, realizó un trasteo correcto y académico, con brindis a Pepe Luis Vázquez y Morante, ante un novillo mugidor y manejable. Mató de dos medias estocadas. Sin ni siquiera una fuerte ovación, se fue a los medios y de allí inició una vuelta al ruedo por su cuenta.

Al término del festejo de anoche, el jurado compuesto por asesores de la plaza de toros de la Real Maestranza sevillana decidió que los finalistas para la novillada del próximo jueves 27 de julio, con ganado de La Peregrina, son Daniel de la Fuente, de la Escuela de Tauromaquia de Sevilla; Rocío Romero, de Córdoba; Manuel Diosleguarde, de Escuela Taurina de Salamanca y Francisco de Manuel, de Escuela Taurina de Colmenar Viejo.

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