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BitBrain presenta ELEVVO, una diadema que optimiza el rendimiento del cerebro

  • Se trata de una neurotecnología pionera para la mejora cognitiva de problemas como la depresión, el déficit de atención o el alzhéimer.

Una imagen de ELEVVO, la diadema que optimiza el rendimiento cerebral.

Una imagen de ELEVVO, la diadema que optimiza el rendimiento cerebral.

La empresa BitBrain Technologies, fundada en 2010 como spin off de la Universidad de Zaragoza y dedicada a la neurociencia, ha creado un dispositivo que permite mejorar la capacidad cognitiva. Se trata de la diadema ELEVVO, un aparato en el que llevan trabajando seis años y en el que han colaborado más de quince instituciones internacionales. En los próximos meses comenzará a utilizarse en centros autorizados por la empresa. Se trata de una solución neurotecnológica que el equipo de BitBrain puso en marcha por la gran alarma social que ha provocado la pérdida de las capacidades cognitivas humanas. El alzhéimer, la depresión, el déficit de atención o la fibromialgia son algunos de los problemas que llevan asociados deterioros cognitivos y que intentan mejorar a través de ELEVVO.

Han creado dos tipos de diademas. Una de ellas es la medical, destinada a pacientes con trastornos mentales como la depresión. La otra es la wellness, para pacientes sanos que quieren mejorar su capacidad cognitiva, destinada al bienestar y el desarrollo personal. Dependiendo de lo que se quiera entrenar los sensores se colocarán en una zona u otra del cerebro. El funcionamiento es muy sencillo. El entrenamiento con ELEVVO consiste en la colocación de un novedoso neuro-wearable que registra los ritmos cerebrales que median en las capacidades cognitivas del usuario. De este modo, es guiado para activar correctamente estos ritmos mediante un innovador modelo de neurofeedback individualizado. El entrenamiento es completamente personalizado, se adapta automáticamente a la fisiología, estado y evolución de la actividad cerebral de cada participante. Adicionalmente, ELEVVO genera informes automáticos que permiten realizar un seguimiento de los entrenamientos y evaluar los cambios tanto cerebrales como cognitivos. Para notar los resultados el paciente debe realizar varias sesiones. Con un mínimo de ocho a diez sesiones la memoria o la atención mejora entre un 10% y un 15% y si se hacen más es posible seguir mejorando.

Los investigadores consideran que este tipo de tecnologías tendrán un gran impacto en nuestra sociedad, permitiendo combatir el declive cognitivo asociado al envejecimiento, optimizando las capacidades clave para el aprendizaje en niños y adolescentes, mejorando el rendimiento de profesionales sujetos a altos esfuerzos cognitivos e incluso mejorando la calidad de vida de personas que sufren deterioros asociados a diversos trastornos mentales como la depresión o el déficit de atención.

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