Almería ha conmemorado este lunes la conquista de Almería por los Reyes Católicos, conocido por los almerienses como el Día del Pendón. La historia del primer Pendón se remonta a 1489. Los actos siguieron un orden y a las 8:00 horas se colocó el Pendón en el balcón de la Casa Consistorial donde se dispararon 21 salvas de ordenanza. A partir de las 10:00 horas, llegó la Policía Local, autoridades locales y provinciales e invitados a la Casa Consistorial. En el evento también ha participado una comisión de la Brigada de La Legión, una colaboración que se lleva realizando desde 1995, año en el que llegó la Brigada de La Legión a Almería.

Los legionarios presentaron a primera hora Honores al Estandarte, dando inicio a la Guardia de Honor en el Ayuntamiento, que concluyó a las seis de la tarde cuando el Pendón fue retirado del balcón principal del Ayuntamiento.

Fue sobre las once menos cuarto de la mañana cuando el alcalde de Almería, Ramón Fernández-Pacheco, realizó la petición de juramento el concejal más joven. Ha sido el edil de Fomento, Comercio y Playas, Carlos Sánchez, por sexto año consecutivo, el encargado de portar del Pendón, bandera que significó la entrada de las fuerzas cristianas en Almería, tal día como ayer, hace 527 años.

El concejal ha afirmado que de nuevo ha sido un honor y privilegio portar el estandarte en esta efeméride. "Yo creo que ha sido éste el año con mayor presencia de público, lo que viene a reforzar la costumbre e Historia de la ciudad que debemos respectar e impulsar como institución", ha declarado.

Fernández-Pacheco, por segundo año como alcalde, pidió el juramento por tres veces al concejal, descendiendo el Pendón desde el balcón mientras que la Banda de Música interpretaba el Himno Nacional.

Después de este acto dio comienzo el paseíllo del estandarte por el casco histórico, al cual seguía la comitiva, con destino a la Catedral donde se ha celebrado la tradicional Acción de Gracias, prólogo de la breve procesión que culminaría, de nuevo, en la Catedral, para una misa solemne presidida por el Obispo, Adolfo González Montes.

Finalizado el acto religioso, los asistentes han regresado de nuevo en comitiva a la Plaza Vieja recorriendo Plaza de la Catedral, la calle Cervantes, Administración Vieja, Mariana y Jovellanos hasta llegar a Plaza de la Constitución. Una vez aquí un año más se ha renovado el gesto de la tremolación por tres veces de la enseña a manos del alcalde.

Ramón Fernández-Pacheco, al término del acto, ha trasladado su satisfacción por la "normalidad" con la que se ha desarrollado este homenaje que rinde la ciudad, destacando la afluencia de público, que se ha congregado bajo los soportales de la Casa Consistorial para presenciar este evento.