Tiene las ideas muy claras. Con 40 años, José María Andújar espera que dentro de una semana pueda continuar el trabajo al frente de la mayor cooperativa de tomate de España, después de que tuviese que dimitir para poder formar su propio equipo para los próximos cuatro años.

Lleva la agricultura en la sangre, pues las cuatro generaciones que le preceden en la familia se han dedicado a cultivar el campo, algo de lo que se siente orgulloso y por ello espera retomar la labor al frente de la Cooperativa Agrícola San Isidro (CASI) con una filosofía centrada en el socio productor, el primer eslabón de la cadena alimentaria, así como el trabajador de la cooperativa. "Debemos mantener un equilibrio, ahora realizaremos un reajuste y una planificación acorde con la situación económica, y entre los factores que debemos mejorar está el de aumentar la cercanía a los recursos humanos y apoyar nuestras decisiones en el diálogo porque todos somos parte de CASI, todas las opiniones cuentan".

Andújar está plenamente confiado en sus posibilidades de cara a las elecciones de la cooperativa almeriense, que se celebrarán el 22 de mayo, pues considera que sería "sorprendente" que ahora hayan cambiado de opinión. A su juicio, "no he podido demostrar en cuatro meses el trabajo que quería desarrollar", por lo que espera volver a salir como presidente, por lógica, puesto que ya obtuvo la mayoría de los votos el pasado 16 de enero, sacando más de 120 votos al segundo candidato.

Para formar el equipo que deberá acompañarlo en los próximos cuatro años, si gana estos comicios, en la Junta Rectora, se ha fijado en las tres zonas de mayor producción de la CASI, para que la cooperativa esté representada de forma mayoritaria en los territorios estratégicos: Níjar, los Llanos de El Alquián y La Cañada.

De ahí son José Manuel Rodríguez, Ramón Sánchez, Juan González, Bonifacio Nieto, José Antonio Flores, Manuel Rodríguez, Antonio Escamilla, Guillermo Vargas y su amigo Vicente.

Para desarrollar un mejor trabajo, José María Andújar tiene previsto definir tres bloques muy concretos: producción, donde aspira a una mayor motivación del agricultor, en apoyo con los técnicos; gestión, con rapidez y eficacia para todos los departamentos; y comercialización, que debe extender sus fronteras, con el reto de llegar a todo el mundo. "Rusia, China e India son países con un crecimiento medio muy alto, con gran potencial comprador", recuerda e incide en que hay que seguir impulsando la IGP a la que pertenece CASI.