El Real Valladolid goleó 0-3 al Almería y sumó un triunfo que le devuelve las opciones de luchar por acceder a la liguilla de ascenso a LaLiga Santander tras un choque en el que los pucelanos fueron muy efectivos, todo lo contrario que el equipo almeriense, gafado ante el gol, sin suerte y que se vuelve a complicar la permanencia.

Los rojiblancos fueron mejores en algunos tramos del partido que el equipo de Paco Herrera, pero pagaron caro su error en el primer gol, logrado por Raúl de Tomás nada más superarse la primera media hora de juego, y su falta de acierto ante la portería visitante.

Esto cambió el decorado de un partido en el que al Almería le faltó acierto ante un Isaac Becerra que impidió el gol local hasta en tres ocasiones, en un duelo en el que la mayor posesión del balón por parte rojiblanca no tuvo el reflejo del gol.

Mientras, el Valladolid supo jugar con el marcador a favor y a la contra para sentenciar, ya en la recta final, merced a un penalti mercado por Mata a los 89 minutos y en otra acción de superioridad en el área rojiblanca que resolvió Joan Jordán en el tiempo añadido.

En la primera parte, el partido estuvo abierto, con solvencia por parte de ambos equipos en su juego, aunque con el Valladolid dando sensación de más peligro al buscar la rapidez de jugadores como Jose Arnáiz y Raúl de Tomás para tratar de desequilibrar el encuentro.

Ambos dispusieron de ocasiones ante un Almería más impreciso en los metros finales, a pesar de que pudo marcar nada más empezar en una acción de Pozo que remató fuera Quique González, si bien luego el control pasó a manos del cuadro pucelano.

El Almería tuvo sus llegadas, como ocurrió mediada la primera mitad. Fue una gran acción de Ximo Navarro que pudo acabar en gol, cuando se fue de tres jugadores y el pase a Fidel lo puso al área para que Kalu Uche se luciera, pero el remate del nigeriano lo defendió bien Isaac Becerra.

La presión alta del Valladolid tuvo sus efectos en el minuto 33. Borja Fernández cedió mal y Raúl de Tomas aprovechó la ocasión para encarar y, sin ponerse nervioso, logró el 0-1. Además, en el 41, pudo hacer el segundo tras otra pérdida del nigeriano Ramón Azeez que condujo Jose Arnáiz, pero su tiro lo detuvo Casto con la cara.

El Almería, con el centro del campo perdido, siguió intentándolo. Quique González la tuvo de cabeza, pero el balón se le fue por encima del larguero, mientras que un minuto antes del descanso la opción fue de Fidel, pero el centro murió fruto de la falta de llegada, cuando Isaac Becerra no llegó a un balón sin rematador.

En la segunda mitad, el Valladolid trató de que se jugara menos ante un Almería que era dueño del balón, aunque sin acierto, unas veces por el disparo y otras por la intervención de Becerra.

A los 6 minutos, Quique rozó el empate, pero mandó el balón al larguero, y en el 63 Uche también pudo igualar en una doble oportunidad que abortó Becerra.

El Valladolid buscó el fútbol a la contra, con dos acciones firmadas por Jose Arnáiz que neutralizaron el meta Casto y el zaguero Nano, aunque en la recta final, con el Almería volcado en pos del empate, no perdonó y logró una victoria muy abultada con los goles postreros de Mata, de penalti cometido por Joaquín sobre él mismo, y Joan Jordán.