Almería

Miles de tapones solidarios viajan desde Almería a Zaragoza para ayudar a Aitana

  • Los padres de la pequeña recogen estos residuos de plástico para entregarlos en una fábrica de reciclado a cambio de dinero · Pueblos del Alto Almanzora se comprometen en la causa con una campaña de recogida

En ocasiones, hacerle la vida más fácil al prójimo es tan fácil y tan poco costoso como guardar los tapones de plástico de cualquier envase en lugar de tirarlos a la basura. Este es el lema que se han aplicado los vecinos de varios pueblos de la Comarca del Alto Almanzora como Bacares, Bayarque, Albox, Fines y Olula del Río, donde decenas de ciudadanos ya han recopilado miles de tapones con el objetivo de recaudar fondos para ayudar a que una niña de 11 años, que padece una grave cardiopatía, pueda ser operada y salvar su vida. Han iniciado una fuerte campaña informativa e incluso se han establecido varios puntos de recogida para hacer más fácil la entrega. Es el caso del Restaurante Las Fuentes de Bacares o la residencia Santo Cristo del Bosque, del mismo municipio, a donde llegan los tapones de todo el pueblo.

Los padres de la pequeña luchan con uñas y dientes para encontrar un rayo de esperanza y que su hija pueda ser intervenida quirúrgicamente en un hospital norteamericano donde ya fue operada con éxito una vez. El Servicio Nacional de Salud español no puede afrontar esta operación y tampoco sufraga los gastos médicos en el extranjero.

La familia de Aitana, la pequeña que necesita de la solidaridad de todos los españoles más que nunca, se ha volcado en la causa de los tapones de plástico en lugar de pedir dinero porque se trata de una ayuda muy poco costosa y con la que todo el mundo puede colaborar. Necesitan un millón de kilos de tapones para sufragar la operación, que cuesta nada más y nada menos que 200.000 euros. Por cada 33 tapones que se entregue en la fábrica de reciclaje, la familia recibirá un euro para Aitana, o lo que es lo mismo, unos 200 euros aproximadamente por cada tonelada.

Cualquier tapón de plástico sirve. De briks de leche, zumos, refrescos, botellas de agua, champú, suavizante, lejía... Y se pueden entregar en cualquier oficina de Seur, que es la empresa encargada de enviar el material, sin coste alguno, a los padres de Aitana, que viven en Tarazona, provincia de Zaragoza. La Fundación Seur pone a disposición de todos los donantes su red de tiendas y el transporte gratuito con la esperanza de cumplir este objetivo.

Pero en la provincia de Almería no sólo los pueblos del Alto Almanzora se han unido solidariamente a la causa, sino que en la capital y en otros municipios también son muchas las empresas y entidades que se afanan en recopilar cuantos más tapones mejor. Es el caso de hospitales, residencias de ancianos, restaurantes, tiendas de comestibles, y sobre todo particulares que han hecho un hueco en sus casas para poner una caja destinada a este tipo de residuos que habitualmente van directos a la basura y que ahora pueden servir para salvar una vida.

Almería, una vez más, está demostrando su solidaridad, como ocurre con la donación de órganos. Y es que la provincia es la zona de España donde más órganos se donan al cabo del año y donde menos negativas se producen, según fuentes de la Junta de Andalucía.

Aitana García nació con una cardiopatía congénita. En el año 2006 fue intervenida en Madrid durante más de 20 horas. Sus padres y familiares, desesperados, se han lanzado en una campaña para conseguir fondos, pues los médicos cuentan que la única solución posible sería un doble transplante de pulmón y corazón, siendo una intervención muy complicada y sin ninguna garantía de éxito. La posible solución está en Boston, donde uno de los cardiólogos más prestigiosos del mundo, ha abierto una ventana a la esperanza.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios