Nuevamente primer viernes de marzo, y con él una cita ya ineludible para todos los cofrades, devotos y simpatizantes del Cautivo de Medinaceli. Un año más, el tradicional y fervoroso besapiés al Señor de Almería congregó a una gran multitud de fieles.

Si durante los tres días que le precedieron tuvo lugar el Triduo en su honor, ayer fue el momento esperado por tantos y tantos hermanos.

Eran las 08:00 horas cuando se abría la puerta de la Santa y Apostólica Iglesia Catedral. En ese momento, pese a la gélida mañana, eran muchas las personas que ya esperaban frente al pórtico para poder besar su bendito pie izquierdo.

Minutos más tarde tuvo lugar la ya típica visita por parte de las autoridades políticas de nuestro Ayuntamiento, en el que este año se ausentó el alcalde de la ciudad, Luis Rogelio Rodríguez Comendador, por compromisos. Sí asistieron, sin embargo, el concejal de Salud Carlos Sánchez o el de Participación Ciudadana, Juan José Alonso.

También asistieron diversos representantes de la provincia como el alcalde de Gador, Eugenio Gonzálvez o Eloísa Cabrera, del Ayuntamiento de Roquetas. Tampoco fallaron a la cita, un año más, representantes de la Diputación de Almería.

Durante toda la jornada hubo misas en al Altar Mayor en honor a Jesús Cautivo de Medinaceli. Las mismas tuvieron lugar as las 09:00, 12:00 y 19:00 horas.

Fueron muchos los devotos que quisieron obsequiar el Señor de Almería con flores y un pequeño donativo, a cambio de los milagros y deseos concedidos por esta venerada imagen cristífera.

El buen tiempo acompañó todo el día a la Hermandad del Prendimiento, a diferencia de los dos años anteriores en los que la lluvia hizo acto de presencia sobre el cielo almeriense. Miembros de la Junta Directiva de la corporación y del Grupo Joven de ésta estuvieron desde las 08:00 de la mañana trabajando por y para la cofradía. Bien con el Señor, limpiando su pie tras el beso de sus devotos, o bien vendiendo los recuerdos y obsqequios del Cautivo.

El obispo de Almería, Adolfo González Montes, también estuvo presente durante el día de ayer besando, además, el pie del Señor de Medinaceli. A las 12:00 ofició la Santa Misa en el Altar Mayor con gran afluencia de público.El dintel del templo más antiguo de la capital permaneció abierto para que todos los devotos realizasen su veneración ante la imagen hasta las 21:30 horas, momento en el que dio comienzo la Función Principal de Instituto de la cofradía. La Eucaristía fue predicada por Juan José Martín Campos, consiliario de la hermandad. Durante la misma, todos los cofrades realizaron la protestación de fe ante el libro de reglas de la corporación.