Almería

Docentes piden ayuda a la Policía contra los padres que olvidan recoger a sus hijos

  • Los agentes intentan localizar a los progenitores y si no lo logran llevan al menor hasta su casa Monitores y profesores, cansados de la situación

El abandono de menores, aunque sea por unas horas, no es habitual en una provincia como Almería que tiene 102 municipios con sus respectivos colegios. No obstante, fuentes de las diferentes jefaturas de Policía Local, profesores e incluso monitores de clases extraescolares aseguran que sí se dan con cierta regularidad casos en los que los padres se olvidan de recoger a sus hijos a la salida del colegio. En este punto, son los docentes o monitores los que tienen la responsabilidad de custodiar al menor hasta que llega algún familiar a recogerlo. Pero siempre y cuando el tiempo no se exceda de lo cordialmente reglamentario, es decir, de entre 10 y 20 minutos, como aseguran los profesores a Diario de Almería.

Cuando el tiempo de espera se alarga ya a cuarenta minutos o incluso una hora, los profesores se ven obligados a avisar a la Policía Local para que intervenga y trate de localizar a los progenitores para pedirles explicaciones y para que se hagan cargo de sus hijos. Este tipo de casos han ocurrido en la provincia de Almería, tanto en la ciudad con en algunos municipios, y así lo han corroborado los propios agentes locales, quienes han explicado además que aunque tratan de evitar trasladar a los menores en el vehículo patrulla, "en muchas ocasiones no tenemos más remedio que llevar al niño a su domicilio en el coche policial".

No en todas las ocasiones se llega a alertar a la Policía Local de este tipo de abandonos de menores a la salida de los colegios. En la mayoría de los casos son los propios docentes, monitores o el conserje del centro educativo los que tratan por todos los medios de localizar a algún miembro de la familia para que se hagan cargo de la situación. Pero muchos insisten en que "no es de recibo que un padre se olvide de recoger a su hijo, que prime el trabajo a un menor o que el olvido se convierta en una reincidencia".

La situación aunque no es alarmante, sí es llamativa. Sólo los datos del año pasado indican que al concluir las actividades escolares al menos 50 niños menores de edad (entre el mes de octubre y el mes de mayo) se tuvieron que esperar en las instalaciones del centro más de media hora porque los padres no fueron puntuales, se les olvidó o hubo malos entendidos para realizar la recogida.

También se han dado casos de abuelas y abuelos que se han quedado a cargo de sus nietos mientras los padres trabajan, estos ancianos han tenido que ser ingresados en el hospital por tener una enfermedad repentina y los menores se han quedado solos.

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