Se cuentan por cientos las asociaciones que dentro no sólo de la capital, sino también dentro de la provincia se dedican a la integración de sectores desfavorecidos o con dificultades que les suponen un problema para su normal participación en la Sociedad. Muestra de ello son las éstas seis organizaciones cuyo fin es ayudar a estos colectivos a llevar una vida mejor, trabajando en diferentes líneas de actuación.

ANDA , es una de ellas. Su objetivo es la integración de pequeños, en especial aquellos que padecen las denominadas enfermedades raras controladas por la FEDER (Federación Española de Enfermedades Raras), y sus familias. En concreto los hermanos de los niños que atienden, pues no quieren que éstos se sientan desplazados, a través de actividades de índole psicológico, logopedia, hipo terapia, músico terapia, fisioterapia, terapia ocupacional, e hidroterapia. Por el tipo de enfermedades que los pequeños participes de esta organización padecen, se erige como una de las más generales de la provincia, queriendo dar cavidad a todos estas anomalías médicas. Sus objetivo más próximo es la organización de convivencias padres e hijos que sirva como mecanismos de unión entre ambos.

Referente al apoyo de las mujeres maltratadas, la asociación FAIS, está instaurada desde 2011 como una plataforma de asistencia ante los casos de violencia de género, ofreciendo actividades de asesoría mental, jurídica e incluso aportando una formación básica , teniendo en cuenta que muchas de ellas llegan si saber leer o escribir. Todo ello, y sin animo alguno de lucro, desde el momento en el que la situación de crisis les hizo a sus socios abrir los ojos ante este tipo de injusticias. Su objetivo a largo plazo es la creación de un hogar de acogida donde puedan dar cobijo a todas las afectadas por este problema, siempre teniendo en cuenta a sus propios hijos que en ningún caso se deben separar de sus madres, a través de talleres como son los de reciclaje guardando siempre su máxima de privacidad absoluta de las identidades.

Los niños menores en riesgo de exclusión social son otro de los sectores que las asociaciones almerienses insisten en proteger. AFINSA, una organización con 14 años de vida se ocupa de chicos inmigrantes que no han cumplido la mayoría de edad y que por diferentes motivos, se encuentran en la ciudad en situación de desprotección. Cuenta con dos centros: el denominado CAI (Centro de Atención Inmediata) donde los acogen durante 6 meses como máximo ofreciéndoles servicios de reconocimiento médico, tratamiento documental, contacto con sus familiares e incluso la formulación del papeleo necesario para la obtención del pasaporte; y por otro lado la residencia que da cobijo a menores escolarizados por ley y mayores instruidos en una formación profesional más especifica a través de talleres e incluso clases de castellano. AFINSA ha tenido que limitar su protección a sólo el género masculino, pues los responsables del centro conscientes de la difícil edad que tienen los chavales, saben que es complicado mantener a niños y niñas en un mismo centro.

`Almería para todos´ es un ejemplo de las varias asociaciones almerienses que se dedican a dar protección y asesoramiento a los inmigrantes, en este caso colombianos desde hace 15 años en la capital. Sus actividades para el beneficio de los socios se centra en los convenios con empresas públicas y privadas, la creación de una cooperativa de alimentos y ropas importadas en muchas ocasiones desde Colombia e incluso elaborados por ellos mismo, o la colaboración conjunta con el Banco de Alimentos para poder dar de comer a familias socias de Almería para Todos, que de verdad puedan acreditar una situación de precariedad. Con respecto a las iniciativas de participación activa de los miembros, dan prioridad a talleres de diseño y moda, formando a diseñadoras, modistas y confeccionistas que elaboran prendas como los conocidos pantalones de efecto push-up. De esta forma se erigen como uno de los colectivos mejor organizados de la provincia e incluso de la península, basándose mucho en la solidaridad entre compatriotas, plasmando el éxito de su esfuerzo por la integración en fiestas anuales en las que hacen especial hincapié en la asistencia de los autóctonos.

En 2001 nace INNOVA, con el claro fin de la inserción laboral de niños mayores de edad y ex tutelados por la Junta de Andalucía, conducidos hasta esta situación por motivos como la inmigración ilegal, o por ser provenientes de familias desestructuradas. Para cumplir con su objetivo cuentan con dos casas, una destinada a los chicos y otra para las niñas, con un máximo por cada una de 7 plazas, y con un periodo tope de un año. En este caso, son los técnicos responsables de la Junta los que definitivamente deciden quienes son los jóvenes que reúnen las características para poder entrar a formar parte de esta plantilla y además se les ofrece la posibilidad de que consigan algunos ahorros propios antes de lanzarse a la vida laboral de manera independiente.

Finalmente, ASALSIDO trata los casos de niños con Síndrome de Down en Almería. Sus objetivos fundamentales es la atención familiar, la organización del ocio y tiempo libre, logopedia y fisioterapia, talleres de informática, bailes, campamentos y viajes e incluso pintura y deportes. Sin embargo, uno de los puntos fuertes es la formación de los padres para que se sientan apoyados y sepan como llevar correctamente esta situación, instando a que los menores puedan tener una vida normal y poder compartirla así con su familia.

En su conjunto son seis organizaciones cuya máxima es ayudar, echarle una mano a sectores desfavorecidos que corren claro riesgo de exclusión social atendiendo a diferentes causas. Bien sea porque son miembros de grupos o familias que sufren estos problemas, los conocen de cerca o simplemente se han concienciado en a raíz de la difícil situación económica, de cuales son los problemas que achacan a la sociedad y quieren ser una pieza que ayude a la solución de los mismos.

Una profesión que si no es por entera, ocupa mucho tiempo del que ellos conocen como libre y además lo hacen con mucho gusto, teniendo en bastante ocasiones que aportar económicamente y personalmente los recursos que a veces ni ellos mismos tienen.

Su labor, pese a todo esto si siguen estando en la sombra. Almerienses o en algunos casos extranjeros que se han afincado aquí y que han decidido aunque en el anonimato ser los ´héroes`de estos sectores, permitiendo que las personas a las que ayudan sea reconocida por los demás, incluidas en un día a día con normalidad y en convivencia con el resto de almerienses que deben concienciarse de éstas situaciones de desventaja y ser también un eslabón de la cadena para la inserción social y como no laboral de los grupos desfavorecidos, ya sean mayores o pequeños, de aquí o de allí...