La autovías Vélez Rubio-Tabernas y Purchena y Huércal Overa son dos infraestructuras básicas para posibilitar una mejor salida de la producción de las empresas de la piedra natural hacia los mercados nacionales e internacionales. El sector del mármol, que es la rama industrial más importante de la economía almeriense, consiguió que la Autovía del Almanzora se comenzara a construir y con una inversión de 160 millones estará para el horizonte del año 2010 como pronto. Tratándose de un proyecto vital para vertebrar el interior de la provincia y cubrir las necesidades de un sector que suma 1.000 millones de euros en ventas y conlleva 5.520 empleos verá la luz treinta años después de comenzar a gestarse, ya que la infraestructura tiene como base un proyecto de la década de los años ochenta.

Consciente de las dificultades de sacar adelante el proyecto en plena desaceleración económica porque tiene un coste de más de 320 millones de euros, Martínez Cano propone a la Consejería de Obras Públicas que se desarrolle por etapas. La primera sería, por orden de importancia, conectar el Centro Tecnológico de Energías Renovables con la A-92 a la altura de Tabernas, un tramo asequible porque no sobrepasa la extensión de diez kilómetros.

Una pretensión que si bien era disparatada hace un par de años, cuando se conoció el proyecto de la Autovía del Mármol, ahora ya está en primera línea de combate al menos para los empresarios. Es más, el Consejo de Gobierno del 27 de junio de 2006 recogía entre las modificaciones del Plan de Ordenación del Territorio Andaluz la conexión norte-sur por el interior de la provincia. La propuesta del entonces parlamentario del PSOE Martín Soler fue elevar el rango de la conexión entre la A-92 norte en la comarca de los Vélez hasta Tabernas pasando por Olula del Río a "eje viario para la articulación de redes de ciudades medias". En su día, el ahora consejero de Agricultura y Pesca argumentó que "este eje interesa a la industria del mármol y, por supuesto, a todo el interior de la provincia de Almería que dispondrá de una carretera de primera".

En este sentido, Martínez Cano explicó ayer que el germen de la A-7 fue un estudio encargado por la Cámara de Comercio a Unicaja sobre la necesidad de conectar la provincia con la Costa del Sol y en la actualidad es una infraestructura fundamental para el progreso de la provincia.