Competiciones nocturnas con vehículos de gran cilindrada, a velocidades de vértigo, en suelo urbano. Derrapes, circulación en zigzag y turismos que invaden el sentido contrario son algunas de las temeridades que desde hace meses presencian los vecinos de la calle Árbol del Paraíso con sólo asomarse a sus balcones. Eso sí, los organizadores de la ilícita competición cuidan los detalles y se encargan de cortar el tráfico entre las rotondas de acceso al barrio de El Puche y la de la calle Acebo, minutos antes de bajar la bandera de salida. Lo hacen con otros vehículos que aparcan de forma lateral impidiendo el paso a la zona de la carrera ilegal para evitar accidentes más allá de los que pudieran provocar durante el fugaz transcurso de la prueba los participantes. De momento no hay vídeos en Internet con los que constatar las prácticas, como sí ha ocurrido en otras provincias como Alicante, pero hay testigos de la zona que han puesto estas carreras ilegales y nocturnas en conocimiento de la Policía Local y Nacional. De hecho, a última hora de la tarde es habitual ya la presencia de patrullas en la zona situada en los aparcamientos del Estadio Mediterráneo a sólo unos pocos metros de la Autovía del Aeropuerto.

Uno de los participantes en las carreras ilegales cuenta desde el anonimato que pagan 400 euros y el ganador se lleva la suma de todos los competidores. A veces son ocho vehículos los que toman parte en la competición, por lo que el premio alcanza los 3.200 euros. Cantidades que resultan insignificantes si son 'cazados' por las autoridades policiales al llevar aparejados los delitos de conducción temeraria y contra la seguridad vial la pérdida de seis puntos y multas de 500 euros a los que se pueden sumar penas de seis meses a dos años de cárcel e incluso la privación del carné.

Los fiscales pueden pedir tras la última reforma del Código Penal el decomiso de los vehículos de las personas que participen como pena alternativa a la prisión. No obstante, son muy pocos los que acaban en el calabozo. Apenas hay detenidos en la provincia en los últimos años por participar en estas pruebas y eso que no es la primera vez que han saltado las alarmas. En abril de 2012 fue la Guardia Civil de El Ejido la que arrestó a un vecino de Dalías por su presunta implicación en una carrera ilegal que casi acaba en desgracia. En el kilómetro 414 de la A-7 colisionó con un turismo ajeno a la carrera sin detener su marcha, pero su matrícula quedó grabada en la retina de un testigo que denunció los hechos para que no quedara impune. Otro de los episodios más trágicos tuvo lugar también en esta arteria. En 2007 perdió la vida una persona, un conocido empresario italiano, y tres más resultaron heridos en la colisión lateral de dos coches que circulaban a gran velocidad, un Ferrari y un Porsche, si bien no se pudo demostrar que fuera una carrera ilegal más allá de la conducción temeraria.

La diputada nacional del PSOE, Gracia Fernández, preguntó en el Congreso recientemente por los delitos de tráfico y las multas de exceso de velocidad en Almería. La respuesta de la DGT dejaba constancia del incremento de las multas por sobrepasar los límites de velocidad establecidos. Desde 2012 se han disparado en más de un 25% hasta alcanzar las 15.149 multas impuestas en 2014 sólo con los radares móviles. En ese periodo de 2012 a 2014 han sido 59.351 sanciones en la provincia.