os contratos que implican movilidad laboral han alcanzado en 2015 la cifra más alta de todo el siglo según Randstad. La región donde se encuentra el trabajador es determinante a la hora de acceder al mercado de trabajo, ya que hay dos tipos de provincias: emisoras o receptoras de trabajadores. Las receptoras son aquellas que reciben más profesionales de los que se marchan a trabajar a otra provincia; mientras que las emisoras son aquellas regiones de las que salen más trabajadores de los que entran. En el caso de Andalucía, Málaga, Huelva y Almería son provincias receptoras de trabajadores, mientras que Cádiz, Córdoba, Sevilla, Granada y Jaén son emisoras. Uno de los factores principales que analiza Randstad en este informe es el sector de actividad en el que el profesional desempeña su trabajo. En este sentido, agricultura es el que mayor tasa de movilidad registra. Uno de cada cinco contratos firmados en agricultura supone el desplazamiento del profesional a otra provincia. Concretamente, el 21,3% del total de contrataciones de este tipo. Construcción se sitúa en la segunda posición, con un 15,7% de tasa de movilidad. Le siguen servicios, con un 11,2%; e industria, con un 9,8%.

Actualmente, las principales provincias receptoras de empleados son Madrid y Barcelona. Ambas tienen un saldo positivo de 206.163 y 55.520 trabajadores respectivamente. Le siguen Baleares (39.717), Murcia (25.013) y Álava (21.757). En España hay dieciséis provincias receptoras. En Andalucía, Málaga, Huelva y Almería son las tres provincias que muestran un saldo positivo de profesionales, en concreto, 13.554, 4.331 y 279 respectivamente. En el lado contrario, se sitúan Cádiz y Toledo, con saldos negativos de 46.901 y 41.577 trabajadores respectivamente. Después, se sitúan Tarragona (-20.698), Sevilla (-22.671), Pontevedra (-22.102), y Alicante (-20.046).