A las doce del mediodía se cierra la cuenta bancaria de la Asociación de Futbolistas Españoles. Los clubes que a esa hora no hayan ingresado el dinero que adeudan a los jugadores que han denunciado ante su sindicato, perderán la categoría. A diferencia de otros años cuando el plazo expiraba a medianoche, en esta ocasión se ha adelantado el reloj futbolístico doce horas. Así, el Roquetas hizo frente ayer a las casi diez denuncias que tenía contraídas para seguir una temporada más dando guerra en el grupo IV de la Segunda División B.

El club roquetero ha realizado una gran temporada en lo deportivo y en lo económico. El Roquetas planificó un año austero y ha logrado bajar ostensiblemente su deuda con respecto a años anteriores. Así, el grueso de la plantilla no ha denunciado los meses que se les deben y tan sólo hubo que pagar a una decena de jugadores que acudieron a la AFE para salvaguardar sus derechos. Con el resto de futbolistas del plantel rojillo, los que más, hay todavía un mes para negociar las cantidades a pagar o llegar a un acuerdo a cambio de la carta de libertad.

Lo cierto es que el Roquetas tuvo que ingresar en la cuenta bancaria de la AFE treinta mil euros y lo hizo antes del mediodía de ayer, puesto que si lo llega a hacer hoy tendría que haber viajado a Madrid, a la sede del organismo futbolístico, para dar en mano el justificante bancario. De esta manera, el club almeriense salvó el pellejo y seguirá una temporada más por lo menos en la categoría de bronce. Para ello, en un segundo plazo, tiene que pagar el resto de dinero [setenta mil euros, por lo que deuda final ascendía a cien mil] antes del 31 de julio.

A lo largo del día de ayer hubo todo tipo de sensaciones en la sede del club. Incluso surgió el rumor de que el Comarca de Níjar, que finalmente no ascendió, podía hacerse con la plaza rojilla en el grupo IV. Sin embargo, el presidente roquetero, Miguel Sánchez, se movió y consiguió los apoyos económicos necesarios para seguir al pie del cañón.

En el terreno deportivo, detenido hasta el momento y que comenzará a planificarse a partir de la próxima semana, muchos jugadores están buscando acomodo en diferentes clubes. El último en marcharse ha sido Morillas, lateral izquierdo que recala en el Conquense. El Roquetas volverá a apostar por un proyecto económico austero, que le asegure la viabilidad dentro de la categoría. De esta manera, los sueldos de los jugadores almerienses volverán a ser de los más bajos de todo el grupo IV.