Charles está decidido a ponerse el mono de trabajo y recoge el guante de ponerse el cuchillo entre los dientes, lanzado por el presidente tras la derrota frente al Sporting: "Intentaremos romper la racha, esta semana estamos trabajando a muerte para que el domingo hagamos lo que sabemos, ganemos el partido y juguemos bien. Es un rival que se juega mucho al igual que nosotros. Le ganó al Barça B y está muy motivado, aparte juega contra el Almería, que va cuarto y ha hecho las cosas muy bien, por lo que ambos nos jugamos la vida".

No queda otra que levantarse y remar para acabar con la racha negativa de resultados que ha sembrado la duda entre la afición: "Los dos partidos ante Las Palmas y el Córdoba fueron diferentes. El primero lo jugamos bien y perdimos, ellos llegaron tres veces y marcaron tres goles. Contra el Córdoba fuimos superiores hasta la expulsión de Soriano. El último día sí fue el peor partido nuestro, pero puede ocurrirnos al igual que le pasa a la selección, al Madrid o al Barça. Hay que aceptar las derrotas e intentar mejorar".

El atacante natural de Belem recuerda que no puede variar tan drásticamente la opinión de la gente respecto al juego del equipo: "Esto es el fútbol. Hace dos semanas todos parecíamos muy buenos y ahora somos todos muy malos, como la gente piensa. Pero somos los mismos que hace dos semanas, cuando éramos los mejores y jugábamos al fútbol muy bien. Tenemos una semana complicada y vamos a intentar hacer nuestro fútbol".

Al igual que Pellerano y los capitanes, Charles se suma a quienes respaldan la labor que viene desarrollando Javi Gracia al frente del banquillo rojiblanco: "Como han dicho mis compañeros, estamos a muerte con el entrenador y vamos a intentar salir en Huesca a por todas, pero no siempre las cosas salen bien. El entrenador, al igual que nosotros, sabe que hemos jugado mal y no hemos estado a nuestro nivel. Así nos lo dijo. Esperamos trabajar para que el domingo logremos el nivel que podemos dar".

El referente de la reacción en Girona tras el parón navideño está ahí, pero Charles prefiere no retrotraerse en el tiempo: "Ahora mismo no hay que pensar en lo que pasó en Girona, sino en el Huesca, creo que el equipo está mejor que antes y eso se nota en el campo, por un partido malo no vamos a decir que somos muy malos y no valemos para nada".

La misión ahora es evitar la presión externa y que el equipo no caiga en errores por caer en las precipitaciones: "No habrá ansiedad, es un partido más aunque muy importante, no solo por perder tres partidos, sino para no dejar escapar a los de arriba". Que vuelva a ver portería tras dos jornadas sin hacerlo podría ser una de las claves.