UD ALMERÍA

Le pillan el truco en las bandas

  • Los rivales extreman la vigilancia sobre Wellington y Édgar para anular el peligro El brasileño vuelve al lugar donde debutó en Primera

En el fútbol moderno, con ediciones en vídeo de todos los partidos en tiempo real a disposición de los cuerpos técnicos, insistir mucho en una determinada forma de jugar termina por concederle facilidades al adversario. Eso es al menos lo que se desprende de los últimos partidos de la UD Almería ante Elche, Villarreal y Athletic, en los que los rivales se limitan a extremar la vigilancia en las bandas para anular el escaso peligro ofensivo rojiblanco, a sabiendas de la enormes dificultades de elaboración que tienen en la media por falta de un futbolista creativo.

Cada vez que Édgar o Wellington Silva intentan percutir por banda se encuentran con una telaraña de rivales que le impiden la progresión, por lo que el centro al área se hace misión imposible y el juego debe volver a la zona sin peligro o los extremos se pierden en carreras a ningún lugar o caracoleos innecesarios.

El futbolista hispano-brasileño reconocía que están encontrándose con dicha problemática: "Por bandas tenemos mucha velocidad y claro, los otros equipos ven los partidos y saben cómo jugamos. Los laterales no suben mucho cuando jugamos, pero tenemos que seguir fuertes y al margen de que vengan dos o tres tenemos que seguir preparados y hacer nuestro juego".

En el Ciudad de Valencia la vuelta de Jonathan Zongo es una opción, pero de nada serviría si el equipo no cambia su estrategia ofensiva, con Hemed demasiado solo para rascar bola.

Es de suponer que Wellington repita en el feudo granota, donde debutó en Primera en el curso 2010-2011 guardando recuerdos agridulces: "Era un niño, tenía solo 18 años, no hablaba el idioma ni entendía casi nada. Tuve un año difícil al estar solo sin mi familia. Fueron cinco meses solo y sufrí un montón por no saber hablar y llegar a otra cultura, pero aprendí y crecí como persona y futbolista. Esos momentos me ayudaron mucho".

Con su recién estrenado pasaporte español y condición de comunitario se le abren nuevas perspectivas al tener contrato con el Arsenal hasta junio de 2016: "He tenido momentos muy complicados y ahora debo aprovechar mejorando cada día porque no puedo contentarme con eso".

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