Quizás motivado por jugar ante el equipo de su tierra, el delantero motrileño Rubén Díaz fue el protagonista de la victoria del Almería B ante el Granada B al ser el autor de los dos tantos del conjunto rojiblanco. Era el primer partido como titular este curso para el ariete de 21 años y frente al líder. No era nada fácil, pero el granadino demostró que tiene un hueco en el once de Miguel Rivera, que está a la altura de esta categoría. Luchó desde que saltó al terreno de juego, al igual que el resto de sus compañeros, y dejó claro que tiene olfato goleador.

Ya se destapó en pretemporada, en la que terminó siendo el pichichi, al contar con más protagonismo debido a que Dani Romera estaba con el primer equipo y Hicham estuvo un tiempo en la enfermería. A pesar de ello, el motrileño ya contaba con muy buenas referencias. En la campaña 2014-2015, Rubén Díaz hizo un total de cinco goles en una competición liguera en la que jugó 30 partidos, aunque solamente fue titular en ocho de ellos, destacando que jugó los noventa minutos en solo cinco de esos encuentros. No fue pieza clave en los planes del técnico Rivera, pero siempre estuvo en la recámara para el malagueño.

En este nuevo curso, Díaz ha actuado en tres partidos. Jugó 33 minutos en la segunda jornada ante el UCAM Murcia y 27 en Cartagena hace dos semanas. Probó el amargo sabor de la derrota en ambas ocasiones, pero el pasado fin de semana pudo celebrar un importante triunfo, logrado por su efectividad de cara al gol. Ante el filial granadino, jugó los noventa minutos y se convirtió en el máximo goleador del Almería B con sus dos dianas, ya que hasta ese momento, los de Rivera solamente habían sido capaces de hacer un gol en cinco jornadas, el que logró Hicham ante el Recreativo de Huelva también en el Mediterráneo.

Rubén Díaz es un delantero centro, corpulento, lo que se conoce como un tanque, que tiene hambre de minutos y que podría convertirse, junto con su compañero Hicham, en un referente goleador de garantías en esta primera vuelta en la que tanto el como sus compañeros deben seguir creciendo como equipo.