Buen amigo de Morcillo, con quien coincidió en Valencia y Recre antes de reencontrarse en el Almería, Montoro debutó en Mestalla en la convulsa etapa tras la destitución de Quique Sánchez Flores y la llegada de Ronald Koeman a las órdenes de Óscar Fernández, que entonces entrenaba al filial che. Su misión como rojiblanco es tomar la manija del equipo y admite que aunque aún no está a su mejor nivel poco a poco irá consiguiéndolo.

-¿Cómo se digiere el mazazo de encajar en el descuento?

-Estamos asimilándolo porque tenemos un partido ya mismo y el míster dijo que las opciones son coger una depresión o seguir peleando. Es una situación complicada, pero soy de los que piensan que estas cosas se solucionan con trabajo. Se ve todo más negativo porque te empatan en el último segundo, aunque el trabajo del equipo fue bueno.

-¿Es cierto que el asistente les comenta que la ley de la ventaja no estuvo bien aplicada?

-Sí que es cierto que nos comenta que había concedido la ley de la ventaja y luego decide pitar la falta, nos dice que se había equivocado y en el túnel de vestuarios al final hubo mucha tensión. Fue flexible porque el ambiente estaba muy caldeado y no dijo nada. Estás con muchas pulsaciones y haces cosas que no se deben hacer, le dices cosas a los árbitros estando con mucha tensión, pero no se vio nada en acta porque ellos mismos eran conscientes de que habían cometido un error.

-¿Para cuándo la mejor versión de Montoro?

-Soy de los que me gusta exigirme y puedo dar mucho más, para ello trabajo. El club confió mucho en mí y yo hice una apuesta importante porque tenía ilusión por jugar aquí. Me gusta ayudar al equipo y quiero dar mucho más.

-Se supone que usted iba a ser el heredero de Corona...

-Me gusta exigirme mucho y como tal no estoy a mi máximo nivel, trato de llegar a él y que las cosas me salgan mejor para beneficio del equipo. Las situaciones provocan que no se esté igual de suelto, pero espero que llegue cuanto antes. Cuando llegó el míster tuve un esguince de tobillo y me costó volver al equipo. Ha confiado en mí y trato de ayudar el máximo.

-¿Por qué les cuesta tanto ver portería?

-Trabajamos con el míster aspectos ofensivos para buscar rupturas, tener más presencia arriba... Encajábamos muchos goles y así era difícil, nos hemos hecho más fuertes en defensa y hay que tener más confianza en ataque porque tenemos potencial arriba para poder explotarlo.

-¿Se imaginaba a Iago Díaz como lateral diestro?

-Estuvo muy aplicado, es veloz y tiene trabajo, es complicado irse de él. Fue una noticia positiva porque ha descubierto una posición nueva en la que puede ayudar al equipo.

-¿Cuál es su mensaje para la afición?

-Seguimos notando su apoyo pese a lo complicado de la situación. Queremos darle mucho más y necesitamos su ayuda y aliento para seguir peleando.