Segunda duelo y segunda derrota para el CD El Ejido esta temporada. Aunque el equipo mostró mejoría con respecto al partido del Álvarez Claro, sobre todo en ataque, los errores en defensa en la primera parte condenaron a los almerienses a un amargo tropiezo ante un rival que con prácticamente nada se llevó un glorioso botín gracias a los regalos de los locales.

Comenzó el conjunto celeste muy metido en el partido, con la defensa muy atenta y avisando muy pronto en ataque, algo que no ocurrió en Melilla. A los dos minutos, Alfonso realizó el primer disparo a puerta, aunque no pudo sorprender a Pol, que despejó con la pierna. Los ejidenses aprovecharon su velocidad por ambas bandas para acercarse al área granadina y, por el centro, David Fernández recuperó numerosos balones para iniciar el contragolpe, pero faltó remate en el equipo de Alberto González que, a pesar de estar mostrándose superior que su rival en los primeros compases, recibiría un jarro de agua fría en el minuto 13.

Gran jugada de Jean Carlos por banda derecha, que rompe en velocidad y gana la línea de fondo para poner en bandeja un pase de la muerte a Luis Suárez, que definió a la perfección para hacer subir al marcador el 0-1. Con este tanto ganó terreno el Granada B ante un cuadro local que había sido mejor, sobre todo en lo que a técnica se refiere, pero sobre el césped de Santo Domingo se impuso la fortaleza física, la potencia individual de los visitantes. Tanto es así, que en el 26', Segura no pudo frenar a Matheus, ni agarrándole, y el diez foráneo se metió en el área y encaró a García para definir a la perfección y hacer el 0-2.

El duelo se ponía muy cuesta arriba para los de casa, que perdieron con el paso de los minutos la contundencia defensiva, sobre todo en el centro de la zaga, mostrada en el inicio. Segura y Bautista, al igual que en el segundo tanto, fallaron en el 0-3 que llegaría en el 34'. Matheus se aprovechó de un regalo de Bautista para meterse en el área, encarar al meta celeste y definir de nuevo a la perfección cruzando el balón a García. El CD El Ejido necesitaba cambiar su esquema con urgencia, el equipo, con el 0-1, dejó de funcionar en labores defensivas. No fue así en jugadas ofensivas, con Javilillo y, sobre todo Alfonso, muy activos. El segundo estuvo cerca de acortar distancias en un remate de cabeza a centro del Neto, pero atajó sin problemas Pol. Pedro Mérida, en el 42', sorprendió ganando por alto a la defensa nazarí y con un cabezazo lejano, a puerta vacía, rozó el 1-3, pero despejó Hongla casi bajo palos. Casi pudo hacer el cuarto en el último minuto de la primera parte Navarrete, pero mandó el balón por encima del larguero solo ante García, que estaba ya vencido. Con el 0-3 se llegó al descanso tras una primera parte en la que los ejidenses regalaron dos goles.

Como no podía ser de otra forma, los del Poniente saltaron mordiendo en la segunda parte. Javilillo tuvo una ocasión clara en el 47', pero mandó el balón a las nubes con un disparo, solo desde el centro del área. Un minuto después la tuvo Pedro Mérida, que le robó el balón al lateral derecho Corozo y encaró a Pol, pero tiró al muñeco en el mano a mano. Estaba apareciendo más en el juego Dani Espinar, que falta hacía, y el CD El Ejido lo notó para bien. Presionó más y se hicieron con el esférico. Protestó Santo Domingo un posible penalti a Javilillo en el 54', pero la jugada acabó con amonestación para el capitán celeste. En el Granada B se empezó a notar el cansancio y su técnico optó por meter a un mediocentro y sentar al bigoleador de la tarde para intentar ganar contundencia en labores defensivas y evitar cualquier reacción local. Aún así, había que tener mucho cuidado con los de Planaguma a la contra.

No bajó la intensidad en este segundo período el cuadro local, que lo intentaba una y otra vez pero sin suerte de cara a puerta. González dio entrada a Paquito para ganar frescura por banda derecha, pero tuvo difícil sorprender a una defensa granadina muy atenta. No arrojó la toalla el CD El Ejido siguió volcado ante la meta de Pol en la recta final, pero el marcador ya no se movería en Santo Domingo, que fue testigo de la segunda derrota de los suyos esta temporada.