Y a la tercera fue la vencida. Necesitaba el CD El Ejido una alegría en forma de puntos después de perder en las dos primeras jornadas de su aventura en la categoría de bronce y la logró en la noche de ayer en el Iberoamericano 2010 ante un San Fernando que también estaba necesitado pero que se vio sorprendido por un conjunto ejidense que, en esta ocasión, sí supo materializar sus ocasiones.

Llegaban los ejidenses a territorio isleño con ganas de dar la campanada, de lograr un primer triunfo en Segunda B que le llenase de moral y confianza y supo hacer sus deberes, aunque no lo tuvo nada fácil. De hecho, los locales se adelantaron poco antes de la media hora de partido por mediación de Gerrit y parecía que se avecinaba un nuevo tropiezo para los almerienses. Pero nada más lejos de la realidad. Los de González se mantuvieron firmes, no perdieron nunca la cara al duelo y nada más comenzar la segunda mitad igualaron la contienda. Fue Álex Bautista, que la semana anterior, ante el Granada B, no estuvo nada acertado en la zaga celeste.

Con el marcador nivelado se creció el CD El Ejido. Y de qué manera. No pasaron ni dos minutos desde que el 1-1 subiera al marcador y los del Poniente ya voltearon el tanteador. Dani Espinar, el cerebro en el centro del campo del cuadro ejidense, firmó un 1-2 que ponía las cosas muy de cara a los suyos ante un oponente que se quedó tocado con este segundo tanto foráneo pero que en el 74', por mediación de Galindo, pondría tablas nuevamente en el marcador del Iberoamericano. La igualdad reinaba en todos los aspectos.

Justo antes del empate, los locales se quedaron con diez jugadores tras la expulsión de Francis en el 72', algo que sería clave para el devenir del choque y que supo aprovechar muy bien el equipo de González, que ya había dado entrada en el 70' a Samu Corral, haciéndole disfrutar de sus primeros minutos en la categoría de bronce. Y vaya regreso tuvo el delantero. El crono superaba ya los noventa minutos reglamentarios cuando el pichichi celeste de la pasada campaña marcó y dio los tres puntos al CD El Ejido cuando el encuentro parecía estar condenado a un reparto del botín. Se erigió como gran héroe celeste en su retorno y demostró que va a darlo todo por estar en el once y ser la pieza clave que fue el pasado curso en el camino hacia el ascenso.