Voleibol l Copa CEV

Encarrilado por la vía rápida

  • Unicaja Almería consiguió ayer la mitad del billete para los cuartos de final tras derrotar en un gran partido al Halkbank Ankara turco, gracias al acierto desde la línea de saque y a un ataque imponente

Unicaja Almería se transforma cuando juega en Europa. Es como el Doctor Jekyll y Míster Hyde. Si en la Superliga le está costando un mundo sacar los encuentros adelante, en la Copa CEV se muestra intratable. De hecho, lleva tres victorias en otros tantos encuentros disputados. En la tarde de ayer, el Ankara se encontró con la mejor cara de un equipo almeriense que se mostró imponente en ataque y muy seguro a la hora de sacar.

El primer set marchó igualado hasta el 18-17. A partir de ahí, un fallo en la recepción turca y un bloqueo perfecto de Hotulevs, permitió a los almerienses coger cuatro puntos de ventaja. Unicaja, poco a poco, se iba creciendo y finiquitaría con un remate de Olteanu, que pasó como una bala entre los brazos del bloqueo de Ankara.

Los gestos de concentración y alegría del banquillo almeriense, con un Carlos Carreño a la cabeza que ha devuelto la ilusión a la plantilla, contrarrestaban con el pesimismo que transmitía Martin Stoer, técnico visitante, que veía cómo su equipo estaba siendo superado con claridad y con calidad por Unicaja.

Un fallo de Sergio Noda al servicio, de los pocos que tuvieron los locales, permitió al Ankara ponerse por delante en la segunda manga. Sin embargo, dos saques directos de Howatson permitieron a los almerienses coger la iniciativa del juego. Juanjo Salvador, creciéndose conforme iban pasando los minutos, le cogió la matrícula a Aleksiev, el mejor de los turcos, y le hizo dos bloqueos prácticamente seguidos, que encendieron un Moisés Ruiz que estaba vibrando como nunca con su equipo. Con 24-21, una invasión en el remate de Todor Aleksiev permitió a los de Carlos Carreño hacerse también con el segundo set.

Como en los juegos anteriores, Ankara comenzó por delante en el tercer set. Pero sólo fue un espejismo. Los turcos eran un muñeco roto en manos de un Unicaja que estaba disfrutando sobre la pista y haciendo disfrutar a la gente en las gradas. Dos saques directos de Howatson, que ya tenía la muñeca caliente y había vuelto loca a la zona de recepción visitante, dejaron casi visto para sentencia el partido. Nogal fue el encargado de finiquitarlo.

Con este 3-0, Unicaja Almería afrontará con tranquilidad el encuentro de vuelta que se celebrará la semana que viene en la capital de Turquía. Consiguiendo un set, los almerienses se meterían automaticamente en los cuartos de final de la Copa CEV.

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