Es de justicia. Carlos Carreño firmó ayer un contrato que le vincula dos años más a Unicaja Almería. El ex jugador y ahora entrenador almeriense ha demostrado con creces que vale para dirigir la nave ahorradora y esta temporada va a tomar la alternativa, tras haber ganado la Copa del Rey, haber clasificado para la final a cuatro de la CEV y haber disputado la final de la Superliga frente a Teruel, la campaña que ha terminado hace unas pocas semanas.

Carreño es un hombre que conoce perfectamente la idiosincracia de Unicaja Almería. Sus años de mejor voleibol fueron defendiendo la camiseta ahorradora y en su tierra le han dado la oportunidad de demostrar sus cualidades al frente de un vestuario. Además, cuenta con la ventaja de conocer a los jugadores con los que se cuenta para la próxima temporada.

"Estoy muy agradecido por la confianza que me están demostrando y ahora estoy esperanzado en corresponder ese apoyo, trabajando para que el equipo obtenga un buen rendimiento. Durante el último mes me he sentido muy arropado, tanto por el resto del cuerpo técnico, por los jugadores que he tenido, por el club, por la ciudad y por los medios, que me han tratado muy bien", dijo el incombustible Charly.

Tras la Copa del Rey conseguida este año en Almería, el principal reto de Unicaja vuelve a ser la Superliga. Los ahorradores estarán también inmersos en competición europea, aunque el torneo doméstico se resiste desde hace un par de años y se quiere volver a lo más alto del podium nacional. "La Superliga no se nos puede resistir. Estaremos en el resto de competiciones y lucharemos a muerte en ellas, pero la Superliga es un objetivo claro", confirmó el técnico almeriense.

Con Charly ya llevando el timón de los ahorradores, ahora es el turno de confeccionar la nueva plantilla. Carreño espera hacer un conjunto nuevamente muy competitivo, retocando la base de jugadores que se mantienen. "Hay cosas que sí me gustaría dejar claras desde un principio, como el tema táctico, sé que es algo que no se aprende en dos días y la pretemporada será idónea para fijar algunos ideales. Tengo un concepto de equipo en la cabeza y trabajaremos para que se alcance un alto nivel".

Carreño está ya manos a la obra de lo que era su "gran sueño". Se siente "capacitado" para sacar lo mejor de los jugadores y sus éxitos serán los éxitos del voleibol almeriense. "La idea del club es la misma, un equipo competitivo y que devuelva la ilusión a los aficionados" de un club que se mostraban partidarios de la renovación de un técnico de la casa. La primera piedra ya está puesta. Ahora, otra papeleta complicada: acertar con los fichajes.