Sin embargo, también se puede considerar como positiva, pues probablemente el entrenador rojiblanco, Juan Manuel Lillo, al igual que los aficionados almerienses que se desplazaron a la ciudad granadina, saliese del Nuevo Los Cármenes con las siguientes dudas en la cabeza: ¿Y ahora a quién pongo?, ¿quién se lo merece más, Diego o Esteban?

Ya sea el español o el argentino el que debute en Pamplona, el de Avilés se fue bastante contento de territorio granadino: "Yo siempre cuando acaba el partido me voy contento. Lo que hice, hecho está. Si las cosas salen mal, paso página rápido. En el fútbol el ayer nunca existe, sólo el hoy y el mañana".

"Aunque también es verdad que el sábado conseguimos una victoria sufrida porque según pasaban los minutos, parecía un partido de Liga más que de pretemporada. Tristemente en pretemporada nos están juzgando ya por los resultados. Pero no estoy tan contento por cómo lo conseguimos porque el Granada apretó y nosotros no fuimos el Almería que conocemos" terminó declarando el arquero asturiano.

Esto habla maravillas de la competitividad que hay ahora mismo en el conjunto de Juanma Lillo. A diferencia de otras pretemporadas, aún no hay un once definido. Sólo se piensa en el presente.

Sin embargo, el presente es que dentro de seis días el equipo debutará en Liga, lo verdaderamente importante. "El sábado pusimos punto final a los partidos de entrenamiento y ahora esta semana nos toca a todos pensar en Pamplona. Todo lo que hemos trabajado tenemos que exponerlo a partir del próximo domingo. Después de un mes y medio sin la tensión de los puntos, lo que queremos los futbolistas es competir".

De todas formas, ya sea amistosos o encuentros oficiales, Lillo ha inculcado a sus futbolistas que hay que ganar siempre, aunque como se ha podido ver en todos los amistosos de pretemporada, al tolosarra también le importa el cómo se vence. "Hay que ganar siempre, hasta en pretemporada se exige esto. Más que como un entrenamiento, te lo tienes que tomar como un partido muy serio, un examen final de pretemporada de donde la gente saca conclusiones. Pero la verdad es que ahora mismo estoy bastante tranquilo porque el domingo empezamos todos con cero puntos y esto sólo ha sido un entrenamiento para, si Dios quiere, comenzar a ganar puntos", dijo Esteban. Todo el vestuario está pendiente ya del partido ante el Osasuna del próximo domingo. Y Juanma Lillo cada vez tiene más difícil a quienes poner. Eso es buena señal.