La Challenge Round es la siguiente ronda en la Copa CEV. En ella estarán los cuatro mejores equipos de esta competición más otros cuatro que caen de la Liga de Campeones. El camino para llegar a ella pasa hoy por Kedzierzyn-Kozle, en Polonia, como antes pasó por Almería en tres ocasiones, por Lamía, en Grecia, y por Groninga, en los Países Bajos. A esa eliminatoria ya llegó Unicaja Almería hace dos temporadas, superando en ella al París Volley francés, lo que le valió para alcanzar la Final Four de la Copa CEV.

El reto continental del Unicaja Almería era llegar lo más lejos posible en esta competición. Desde el club almeriense se ha trasladado el favoritismo al rival. En el partido de ida, el pasado jueves en el Pabellón Moisés Ruiz, se vio a dos equipos muy parejos. Los polacos se mostraron como un bloque sólido, aunque quizás echaron en falta la ausencia de varios de sus baluartes, como el colocador Zagumny o el receptor Swiderski.

Axel Mondi, entrenador del Unicaja Almería, ha incidido en ese favoritismo para el Zaksa Zedzierzyn-Kozle, aunque "el hecho de haber ganado aquí y tener la opción de volver a hacerlo allí es una ilusión y ganas para pasar la eliminatoria". Desde Polonia también se ven como favoritos, y así lo expresó su técnico, Chris Stelmach, diciendo que "tenemos a más de 2.000 aficionados de nuestro lado, así que veremos a ver qué pasa". También su capitán, Ruciak, que afirmó que "ganaremos y jugaremos el set de oro, pasando a la siguiente eliminatoria".

Unicaja viaja sin Chourio, en Venezuela, y con Sevillano y Salvador sin estar al 100%. Mondi tendrá que seguir con el sexteto habitual. Y a ganar... aunque sea en el set de oro.