Romper con la estacionalidad, ansiado y viejo objetivo del sector turístico almeriense desde hace muchos años y por el que la Administración lleva trabajando con especial ahínco en los últimos meses a través de la calidad y la fidelización del visitante. Ahora parece que se empiezan a recoger los primeros frutos.

El pasado 23 de agosto el Instituto Nacional de Estadística publicaba los datos correspondientes a la ocupación hotelera de julio, donde Almería salía muy bien parada. Ayer fue el turno del delegado de Turismo, que en representación del gobierno andaluz hizo su valoración de unos datos que fuera de la época estival también invita al optimismo.

"Al igual que ocurre en el resto de Andalucía, Almería consolida su crecimiento turístico y apunta a una reducción efectiva de la estacionalidad. En el pasado mes de julio, los viajeros ascendieron a 216.363 y realizaron 984.247 pernoctaciones en la provincia, lo que supone un incremento del 7,6 y del 6,1%, respectivamente, comparando las cifras con las de 2015", explicó ayer el delegado en rueda de prensa. Las cifras son más positivos si cabe analizando la evolución desde que comenzara el año, con 788.445 viajeros que efectuaron 3.134.744 pernoctaciones entre los meses de enero a julio. Esto se traduce en un incremento del 12,5% y del 18,9%, respectivamente, con relación al mismo periodo de 2015.

Valdivia señala que estos incrementos "superan las cifras anteriores a la crisis y apuntan a que será un año de récord". Además, recuerda que a los resultados del pasado mes hay que sumar la evolución experimentada en junio, de modo que en los dos primeros meses de la temporada estival los hoteles de Almería sumaron 1.593.633 pernoctaciones.

Así, Almería "consolida su crecimiento gracias al auge de la demanda en época estival, pero también gracias a una mejora mucho más significativa de las cifras fuera de la temporada alta y en especial en las zonas de interior". En julio, el Parque Natural Cabo de Gata-Níjar y el Poniente alcanzaron una ocupación superior al 90%, en la comarca del Almanzora rebasó el 80% y en la capital en torno al 75%. "Estamos ante una clara tendencia de reducción de la estacionalidad, ya que desde 2014, los crecimientos fuera del periodo estival están siendo más acusados que los registrados en verano". Además, Valdivia hace hincapié en que esta reducción efectiva de la estacionalidad no solo viene acompañada de un mejor reparto de los flujos turísticos en el tiempo, sino también en el territorio".