La Junta de Andalucía, a través de la Consejería de Cultura ha impuesto una sanción de 30.000 euros a la empresa propietaria de El Cortijo del Fraile. El pasado lunes se envió la resolución de la sanción impuesta a la empresa propiedad de la finca donde está el Cortijo por no haber presentado un proyecto en tiempo y forma en la Delegación de Cultura, para evitar que el cortijo se siguiera cayendo. El delegado de Cultura, Antonio Lucas apuntó ayer que "considero proporcionada la sanción", desestimando hacer cualquier otro tipo de valoración al respecto.

"Creo que es una cuestión ejemplarizante y es la primera vez que se toman unas medidas así. Esto del patrimonio es algo muy serio y el que no cumpla con sus obligaciones, tiene que atenerse a las consecuencias", matizó Lucas. No obstante, la empresa que ostenta la propiedad donde se ubica el Cortijo del Fraile tiene ahora opción de presentar un recurso a esta resolución, que los sanciona a pagar 30.000 euros.

Por otra parte, El Cortijo del Fraile ha sufrido nuevos desprendimientos en las últimas semanas. A la situación de ruina y abandono del inmueble se suma ahora la caída de varios techos interiores, correspondientes a la zona de corrales, con lo cual si nadie lo evita, en pocos meses el cortijo en su mayor parte, se caerá y de nada habrán servido las medidas adoptadas hace un año para evitar su deterioro.

De momento, el Cortijo del Fraile se cae a pedazos, y además cada vez con más rapidez. Durante años el inmueble ha estado prácticamente abandonado, pero ahora su deterioro es palpable.

Un miembro de una Plataforma que reivindica la restauración del Cortijo sostiene que "el día que se caiga la torre de la ermita entonces se irá todo abajo. Entonces se volverá a formar un lío, se producirán manifestaciones, aunque ya será muy tarde".