Cultura

'Clásicos: ¡a escena!' invita a subir a las tablas del Apolo a los estudiantes

  • Alumnos de varios centros representaron ayer la obra que han ensayado durante el curso · Seis colegios de Almería y provincia participaron en esta novedosa propuesta para las Jornadas del Siglo de Oro

Las XXVIII Jornadas del Siglo de Oro de Almería continúan desarrollando actividades dirigidas al público más joven. Estudiantes de seis institutos de la provincia participaron ayer en la actividad Clásicos:¡a escena!, organizada en colaboración con los equipos docentes de los centros que han apoyado esta novedosa propuesta de las Jornadas.

Desde las 9:30 horas y hasta las 14 horas los jóvenes actores interpretaron los personajes de las obras que han ensayado durante el curso en los diferentes talleres de teatro y aulas de Literatura de los centros educativos. Se trata de clásicos del Siglo de Oro seleccionados por los propios institutos que subieron a escena en este encuentro cultural que cumple un doble objetivo: dar a conocer a los estudiantes el trabajo realizado por sus propios compañeros sobre obras y autores clásicos, a la vez que fomentar un encuentro y convivencia de jóvenes que dedican su tiempo e ilusión al teatro aportando una visión nueva de los clásicos.

En esta propuesta participó el IES Sol de Portocarrero de La Cañada que representó El retablo de las Maravillas y La guarda celosa, de Miguel de Cervantes. Estuvieron a un gran nivel.

La Escuela de Artes de Almería puso en escena un fragmento de La vida es sueño de Pedro Calderón de la Barca.

El IES El Alquián de Almería a través del grupo Macarrones del Desierto representaba Herir por los mismos filos de Luis Antonio Moncín.

El IES Las Norias de El Ejido puso en escena la obra Visiones de la muerte de Pedro Calderón de la Barca. El grupo que saltó a las tablas era la Tarumba de las Norias

El IES Sabinar de Roquetas de Mar hizo Hércules y los oráculos, de Diego Reche y el IES Cruz de Caravaca hizo De amor, antología de pasajes clásicos de la Literatura amorosa y Los habladores, de Miguel de Cervantes.

Hubo un gran ambiente, y un lleno en el Apolo. Los propios alumnos vieron la calidad artística de sus compañeros.

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