Opinión

Rafael Leopoldo Aguilera

Intermunicipal

APESAR de las muchas dificultades con las que nos estamos encontrando en este peregrinaje diario, de tribulaciones económicas y sociales, la Intermunicipal del Partido Popular es un signo esperanzador para poder decir tolerancia cero con quién actúe públicamente o privadamente vulnerando la legislación, y por otro lado, las medidas necesarias y oportunas para llevar a cabo la descentralización administrativa con homogeneidad en todo el Estado español. Han quedado claro los principios inspiradores para la reforma de la Administración Local, no podemos mirar más que al frente para poder reconducir y purificar el ámbito más cercano a los ciudadanos y ciudadanos que esperan una resolución administrativa de nuestras demandas y nuestras inquietudes basada en los intereses generales y públicos de la colectividad.

Las principales claves de la reforma de la Administración local están por los temas que han sido tratados, y muy especialmente, el fortalecimiento de las Diputaciones Provinciales, la reforma de la Administración Local y la necesidad de redimensionar las Administraciones Públicas.

Para desarrollar las funciones de las Entidades Locales se necesita distribuir adecuadamente los recursos entre los distintos niveles de gobierno de acuerdo con las competencias asumidas distribuyendo adecuadamente los mismos, el justo tratamiento del municipio según el tamaño, mejorar la corresponsabilidad fiscal y mayor "lealtad institucional". Para ello será necesario que los ciudadanos y ciudadanos valoren los objetivos de la gestión pública llevada a cabo por las autoridades investidas por la potestad, que realizan de forma loable y plausible sus encomiendas, en muchos casos, o en la mayoría de casos de forma filantrópica y altruista, y del personal co afecto al mismo, a través de la transparencia municipal y mejorando la información e indicadores de gestión de las administraciones locales como prestadoras básicamente de servicios, clarificando cuales y repartir la financiación de acuerdo con las competencias asumidas, lo que no significa necesariamente mayor financiación. Es el momento de prepararnos para un escenario de menos recursos y esforzarnos por aumentar la eficiencia, lo que pasa entre otras cosas por una reordenación del mapa municipal, ya que los ayuntamientos no tienen como finalidad la salvaguardia/generación de los sentimientos identitarios, sino para la resolución de los problemas.

Se trata de ir a un mejor control del gasto y las concesiones, más transparencia y evitando fórmulas imaginativas de "huida del derecho administrativo", mejorando con ello la información y evaluación de las administraciones públicas locales en aras a la reforma de la Ley de Bases de Régimen con un nuevo listado de competencias municipales, suprimiendo aquellos artículos propios de las Comunidades Autónomas y/o del Estado, impulsando las Diputaciones y evitando las duplicidades.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios