CAJAMAR, Caja Rural, a través del Servicio de Publicaciones de la Fundación, que lleva su propio nombre cooperativista almeriense, presidida por Antonio Pérez Lao, y con carácter emérito por su fundador Juan del Águila Molina, quien, desde el estrado en la sede social en la Casa de Las Mariposas, con firmeza oratoria expresó en la presentación del número 25 de la Colección Estudios Socioeconómicos: Mediterráneo Económico, las reflexiones efectuadas por relevantes autores de este volumen, que proponen una serie de pautas y reformas estructurales de largo alcance para un nuevo modelo económico para España, sin olvidarnos nunca de lo esencial y crucial que es el agua para la pervivencia a gran escala de la agricultura y su industria auxiliar en la provincia de Almería.

Sí todos los números de la referenciada Colección son manuales interdisciplinarios con un marcado carácter académico, este último dirigido por Manuel Gutiérrez Navas y coordinador por Rafael Myro, es sin lugar a dudas, el que ha despertado un mayor interés en su análisis, descripción y valoración, no solo, como en anteriores, por su rigor científico y divulgativo, sino por el desarrollo entre sus 386 páginas de soluciones efectivas, a través de las reformas estructurales, para una nueva etapa de crecimiento económico en España. Destacar el acierto metodológico y didáctico en el desarrollo de la ponencia de Alejandro Nieto García de la Universidad de Alcalá, con quien comparto la opinión cualificada que tiene en relación con el Informe de 2013 de la Comisión para la Reforma de las Administraciones Públicas. Una reforma a la que se le echa gasolina al vehículo y no se sabe qué dirección cogerá, va a ser difícil llevarla a puro y debido efecto las 218 propuestas formuladas. al no corregir institucionalmente los efectos de la actual situación y las causas que lo provocan, en especial las carencias, vicios, disfunciones y contradicciones, que en las Administraciones Públicas son innumerables, pero que en la actualidad, a los ciudadanos lo que más les llama la atención es la corrupción de sus comportamientos y la inactividad de sus respuestas. Es necesario que la Administración Pública con una configuración jurídica de los años 60 del anterior siglo, sea una Administración adaptada al siglo XXI, y coopere con su intervención pública, en participar junto a los ciudadanos y empresas, en superar la crisis económica.