LAS negociaciones en el fútbol suelen dar un giro de 180 grados en cuestión de minutos. Por eso, mientras leen estas líneas redactadas ayer, es posible que Kalu Uche ya esté haciendo las maletas o incluso haya llegado a Inglaterra para firmar por su nuevo club. No obstante, pase lo que pase, existen numerosas razones que invitan a criticar la táctica que se está o se ha empleado para sacarle el máximo provecho económico al nigeriano, porque ni se me pasa por la cabeza que alguien de la directiva o del cuerpo técnico con un mínimo de sentido común, piense en seguir contando con Uche para el futuro. El pasado 26 de julio ya me referí al mismo tema, y de nuevo vuelvo a reiterar parte de las razones por las que creo que Uche debe cambiar de aires sí o sí, porque no podemos arriesgarnos a que el delantero se convierta en un muerto viviente, muy bien pagado, con su cabeza en otro sitio. El nigeriano jugará la Copa de África durante el próximo mes de enero, y también es muy probable que su país dispute el Mundial. Desde luego, no es lo mismo si Uche utiliza dichos eventos como escaparate de cara a su último gran contrato, o si el nigeriano disputa la competición nacional que le corresponda sin presión al tener asegurado su porvenir. Como sabemos que en su mente las palabras futuro y Almería se convierten en antónimos, no hay nada más que decir. Por lo expuesto, sorprenden las recientes declaraciones de Alberto Benito en las que afirma lo difícil que sería encontrar otro delantero con su calidad. Que yo sepa, hoy no es 28 de diciembre. O si no, el absurdo tira y afloja del presidente por conseguir más euros. Espero que no le salga el tiro por la culata.