A pesar de que el Valladolid jugó en inferioridad numérica casi todo el encuentro, el Almería realizó una excepcional segunda mitad. No le debe servir de excusa al conjunto de Mendilibar el hecho de jugar con diez tantos minutos, porque en infinidad de ocasiones hemos visto que apenas se vislumbra el equipo que está en desventaja. Ni siquiera la excusa de la preparación física al estar al principio de la temporada, disculpa a un conjunto que en la segunda mitad parecía que jugaba con nueve. Buena culpa de ello la tuvo el Almería que dio una excelente impresión tras el descanso. Quizás se echó en falta a Goitom, aunque uno de los enemigos que anoche tuvo el equipo de Hugo Sánchez fue el césped. Si no, que se lo pregunten a Crusat cuando falló una gran ocasión. Y es que se tuvo que maquillar de verde el terreno de juego para que diera la impresión de que estaba en buenas condiciones. Yo, como la inmensa mayoría, no entiendo de esta materia, pero ¿no hay manera de que por una vez el césped del Mediterráneo esté en buenas condiciones al principio de la campaña? En toda España hace calor en verano, no sólo en Almería. En cualquier caso, no hay que preocuparse por el resultado de ayer, ya que en la pasada temporada, tanto el Recreativo de Huelva como el Numancia, que acabaron último y penúltimo respectivamente, lograron la victoria en sus enfrentamientos. Sin embrago, el histórico Barça de Guardiola comenzó perdiendo precisamente en Soria. Aun así, y a pesar de la buena impresión del conjunto de Hugo, convendría aprovechar las horas que quedan para el cierre del plazo de fichajes de cara a reforzar una plantilla demasiado corta.