DEBIDO a la celebración del Mundial, el Almería está teniendo más tiempo para diseñar su plantilla, aunque tampoco convendría dormirse en los laureles. En la portería, dando por hecho el traspaso de Alves, a día de hoy nos encontramos sin el teórico guardameta titular. No nos engañemos, Esteban tiene su rol, y el que venga no estará a la sombra del asturiano. En defensa el vacío es enorme. Si Juanma Ortiz continúa en el lateral, y Acasiete, pese a su regular campaña, formaliza su renovación, tan sólo se les unirían Michel y Chico. Yo creo que al gaditano no le vendría mal madurar de rojiblanco un año más. La posible vuelta de Carlos García no me convence. Como ha demostrado en el Betis, hace tiempo que se le quedó grande la Primera. Con Pellerano no cuento hasta enero. Por el flanco izquierdo, no se le ha hecho el contrato de su vida a Cisma, me parece bien, y se pretende ceder a Guilherme, al que le daría una última oportunidad. Para intentar aprovechar su enorme potencial, ¿ha sido el brasileño tratado seriamente por algún psicólogo? Por otra parte, la declarada intención de contratar a un central zurdo para suplir las ausencias del futuro lateral izquierdo, conllevaría sus riesgos. El centro del campo sí que está definido a falta de algún retoque más, pero la delantera también tiembla. Solari se fue sin verlo jugar, David Rodríguez volverá a su categoría, Crusat prefiere cambiar de aires, Nieto tiene una empanada mental, y a Natalio no se le espera aunque el filial ascienda a segunda B. Por lo tanto, excepto Piatti y el merecidamente renovado Ortiz Bernal, no hay nada claro. Goitom seguirá, si bien no pondría la mano en el fuego, y sobre Uche se podrá hablar tras el Mundial.