Dos plantaciones de marihuana, con exactamente 161 plantas en total, ubicadas en el Paraje de Los Alcores del municipio fueron en el día de ayer desmantelada por medio de la Policía Nacional gracias a las informaciones anónimas aportadas por algunos ciudadanos que denunciaron la existencia de la misma.

Ha sido precisamente esta inestimable colaboración la que ha permitido, además, la detención de dos personas a las que se acusa también de realizar durante la noche enganches ilegales en las fincas colindantes con el objeto de suministrar de agua la plantación ilegal. Según fuentes policiales, ambos detenidos se encuentran ya en prisión.

Según indica la Comisaría de Policía, la aprehensión ha permitido hacerse con unos 118 kilos de cannabis. La investigación, que ha dado con las detenciones de ayer, se inició a principio del pasado mes de agosto a raíz de diversas informaciones anónimas de ciudadanos que apuntaban a unos posibles invernaderos ilegales de marihuana en el Paraje de los Alcores.

Tras unas primeras gestiones, los investigadores policiales constataron que las plantaciones se encontraban en un lugar de difícil acceso, y que eran camufladas por unos matorrales de unos 300 metros de diámetro en un terreno abandonado, lo que imposibilitaba su visualización desde el exterior, circunstancia que los detenidos aprovechaban para desarrollar el cultivo y no levantar ningún tipo de sospecha.

Los agentes constataron que las plantaciones estaban siempre vigiladas por dos hombres, de nacionalidades española y lituana de 50 y 18 años de edad, relevándose entre sí. Además, las plantaciones de marihuana eran habilitadas a su vez como laboratorios, dónde tras su proceso de cultivo, corte, secado y manipulación del cannabis, era distribuido a pequeños traficantes de El Ejido para su venta a consumidores.

Al inspeccionar las plantaciones los policías pudieron observar cómo por las noches, cuando los trabajadores de las fincas colindantes se retiraban, los vigilantes conectaban mangueras en balsas y abastecían de agua los invernaderos cultivados para el riego de las plantas de marihuana.

Con todas las pruebas, se llevó a cabo un dispositivo policial en el que los agentes cercaron los terrenos y arrestaron a los dos hombres que se encontraban en el lugar. También intervinieron un total de 161 plantas distribuidas en dos zonas de unas 80 plantas cada una con una altura de 1,80 a dos metros, aproximadamente. También hay incautados varios embases de fertilizantes y una báscula de precisión.

Las investigaciones han sido llevadas a cabo por agentes de la Brigada de Policía Judicial apoyados por la UPR. El caso está siendo llevado por el Juzgado de Instrucción 4 del municipio.