El camino por la senda del río Grande en Yunquera comienza precisamente en el punto donde este sendero fluvial tiene su origen. El río Grande surge de las profundidades de la tierra a través de grietas enormes, emergiendo de un acuífero en Sierra de las Nieves y desembocando su caudal en el Guadalhorce. Por esta razón, la cueva de Zarzalones, situada en la fuente del río Grande, es un símbolo distintivo del paisaje en la Sierra de las Nieves.

La caverna ha suscitado siempre el interés de los espeleólogos a nivel global. Desde las primeras exploraciones realizadas por buceadores de Fuengirola en 1978 hasta el presente, han sido múltiples las expediciones que han investigado sus pasajes sumergidos y espacios aéreos.

Desde su origen, el caudal del río Grande fluye encajonado entre terrazas cultivadas y un estrecho desfiladero de piedra caliza adornado con hermosas cascadas. Este tramo agreste, que concluye cerca de la central eléctrica de San Pascual, es conocido como el cañón de Zarzalones. A partir de este punto, el río Grande se ve limitado por empinadas colinas cubiertas de olivos, almendros y pinos, mientras a lo largo de las orillas de la ruta se desarrolla una densa vegetación compuesta por sauces, álamos, tamariscos, cañas, adelfas y muchas otras especies que proporcionan refugio a la fauna local.

En realidad, tanto el recorrido del río como las diversas zanjas, represas y canales que se distribuyen a lo largo de toda la ruta son hábitats importantes para la fauna, especialmente para los insectos. Otro aspecto destacado de la ruta del río Grande es que alberga la mayor concentración de barrancos deportivos en la provincia de Málaga. Por ejemplo, el desagüe de la presa de San Pascual es una de estas opciones; la topografía y la abundancia de agua se combinan para permitir a los entusiastas de este deporte disfrutar del barranco de Aguainjerta.

Ubicado justo arriba de la cueva de Zarzalones, en la parte final del arroyo del mismo nombre, aquí podemos encontrar varios descensos en rápel, toboganes, áreas sombrías y un tramo aéreo final de 37 metros, solo para excursionistas con experiencia. Si eres principiante, es mejor empezar con algo más sencillo; el río Grande ofrece opciones adecuadas para ello.

El trayecto de este sendero es circular y ofrece dos opciones: la primera sigue el lecho del río hasta la última cascada del cañón de Zarzalones, mientras que la segunda se adentra en el conocido barranco de Aguilera. Este barranco ofrece un emocionante descenso, con una caída inicial en rápel de 33 metros. Para estas actividades, es altamente recomendable contratar los servicios de alguna empresa de turismo activo local. Independientemente de la ruta elegida, ambas comienzan y terminan en Yunquera.

Recuerden que para la parte acuática, es necesario llevar traje de baño y calzado deportivo que se pueda mojar. Eviten usar zapatillas de alta gama reservadas para ocasiones especiales. Además, hay que tener en cuenta dos cosas importantes. Primero, esta ruta pasa cerca de fincas y campos de cultivo donde está prohibido tomar frutas sin permiso; evitemos conflictos con los lugareños. Segundo, está estrictamente prohibido bañarse en las presas y canales del complejo hidroeléctrico. Si desobedecen esta advertencia y ocurre algo, no podrán decir que no fueron advertidos...