El Unicaja salió desde el aeropuerto de Belgrado en un chárter rumbo de vuelta a Málaga pasadas las 1:00 de la mañana para aterrizar en la Costa del Sol pasadas las 4:00 de la madrugada y salir mientras le esperaba la afición ya después de las cinco. Los jugadores tienen por delante una semana durísima con el cansancio acumulado. Y es que este miércoles hay una reedición de la final en La Laguna ante el Lenovo Tenerife en un partido de la Liga Endesa y el domingo se remata la semana ante el UCAM Murcia en el Carpena. Precisamente los dos rivales que ha tenido el equipo en este fin de semana mágico en Belgrado para llegar al título.

Después de que se cerrara la agenda con instituciones, la comitiva saldrá desde Los Guindos a las 17:30 horas. Después se hará la ruta clásica, para acudir a la sede de Unicaja en la plaza de la Marina (18:00 horas) para ir después al Ayuntamiento (18:45 horas) y cerrar en La Victoria (19:30), como se hizo la pasada campaña después del título de Copa. Es la previsión aunque no es sencillo mantener los horarios en un evento así. No hay mucho margen para el festejo, después habrá una cena sin poder estirar demasiado porque el martes ya hay entrenamiento y a media tarde hay viaje rumbo a Canarias. Es la locura del calendario del baloncesto europeo en estos momentos en los que no se puede ni de disfrutar de un triunfo. 

Progresivamente se irán haciendo las visitas a la Junta y Diputación. Y el domingo está prevista la gran fiesta de celebración con la afición en el mismo Carpena, con el alzado de la bandera después del sexto título de la historia de la entidad, logrado en Belgrado. Un momento especial y cada vez hay que hacer más hueco para el estirón que se ha dado en las dos últimas temporadas con la Copa y la BCL. Tiempo de disfrutar.