Salud

Micropigmentación para mujeres mastectomizadas de Almería

Intervención de Cristina Sola, la enfermera especializada del Hospital Universitario Torrecárdenas, para dibujar pezón y areola a una paciente.

Intervención de Cristina Sola, la enfermera especializada del Hospital Universitario Torrecárdenas, para dibujar pezón y areola a una paciente.

El Hospital Universitario Torrecárdenas ha incorporado la micropigmentación en la reconstrucción de la mama tras la cirugía oncológica. Tras una mastectomía, en la mayoría de los casos el pecho se puede reconstruir aliviando a la mujer esa la sensación de estar amputada. Los avances en este proceso han sido muchos en los últimos años, sin embargo, en ocasiones el pecho no queda completo.

Una de las primeras pacientes que han sido valoradas en la Consulta de Micropigmentación del Hospital Universitario Torrecárdenas Una de las primeras pacientes que han sido valoradas en la Consulta de Micropigmentación del Hospital Universitario Torrecárdenas

Una de las primeras pacientes que han sido valoradas en la Consulta de Micropigmentación del Hospital Universitario Torrecárdenas

Hace precisamente una semana que la especialista de la consulta ha comenzado a citar a las primeras pacientes y han sido ya una veintena de mujeres las que se han valorado y sometido a las pertinentes pruebas de alergia previas a la realización de la micropigmentación. Serán decenas de mujeres de la provincia de Almería las que se beneficiarán de esta técnica que supone un aumento de la autoestima y una mejora de la calidad de vida para las pacientes que tras haber superado un proceso complicado de enfermedad ahora tienen la oportunidad, gratis, de verse con el pecho completo. Hasta ahora, las que se sometían a una mastectomía como tratamiento quirúrgico del cáncer de mama salían del quirófano habitualmente ya con el pecho reconstruido, es decir, con su prótesis puesta. A partir de ahora, además, podrán tomar la decisión de micropigmentarse el pezón y la areola para dar más realismo a su pecho.

La Consulta de Micropigmentación del Hospital Universitario Torrecárdenas está liderada por la enfermera Cristina Sola que durante meses ha estado formándose para pilotar este nuevo servicio que ya ofrece el hospital de referencia a mujeres de toda la provincia. Además, tal y como ya avanzó Diario de Almería en exclusiva, hay otra profesional sanitaria en el proceso formativo para sumarse a la consulta e iniciar un proceso continuo de tratamiento para las pacientes. En el futuro, el objetivo es ampliar el catálogo de servicios y ofrecer tratamiento también a los hombres. Como explicó Cristina Sola, la idea es hacer micropigmentación para dar realismo a las mamas pero también micropigmentar cejas a mujeres y hombres que estén en tratamiento de quimioterapia, entre otros.

Coordinación con la Unidad de Mama y Cirugía General

La Consulta de Micropigmentación, en constante coordinación tanto con la Unidad de Mama como con la Unidad de Cirugía General, se encuentra en la cuarta planta del Hospital Materno Infantil Princesa Leonor de Almería. Esta es una consulta holística, tan médica como otra aunque su camino huye de la frialdad impuesta por la bata blanca. se estima que por ella puedan pasar más de medio centenar de mujeres en los próximos meses, primero para su valoración y acto seguido para su intervención.

La enfermera especializada en micropigmentación del Hospital Universitario Torrecárdenas, Cristina Sola, se ha formado con Rodrigo Gálvez, tatuador almeriense de gran prestigio, y en el Hospital San Cecilio de Granada

Entre las cuatro paredes de esta nueva consulta, como describe la enfermera especializada Cristina Sola, “se lucha contra las cicatrices emocionales que deja el cáncer en una persona y borra las huellas de la tragedia personal para colorearla de normalidad”.

Una de las primeras pacientes ha sido precisamente una almeriense de 45 años, S. R. A., que hace tan solo un mes relataba a Diario de Almería que “todos los días te ves en el espejo y no te ves entera … Yo decidí no conservar la areola en la cirugía para evitar cualquier tipo de riesgo por mínimo que fuera. La falta del pezón y la presencia de las cicatrices te recuerdan todo el dolor y el sufrimiento vivido, las cicatrices las llevas dentro … Ahora tengo otra meta y la mente puesta en el día que mi cuerpo esté preparado para tatuarme, para empezar a verme bien, con mis pechos bonitos e iguales, sin recordar mi enfermedad a cada momento”.

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