El coordinador de Ecologistas en Acción, Marcos Diéguez, ha criticado que el Ayuntamiento de Níjar "prefiere que siga habiendo roturas en las instalaciones de Presillas Bajas, para que Aqualia cambie poco a poco toda la red, con arreglos metro a metro sin tener que abonar en este proceso un solo euro".

El ecologista ha recordado que Aqualia, filial de gestión de agua del grupo FCC, es socia del Ayuntamiento de Níjar en Emanagua (Empresa Mixta. Municipal de Aguas), responsable del suministro en el municipio. Aqualia se hace cargo de las reparaciones en la red, mientras que el Consistorio lo hace de las renovaciones en ésta.

Al parecer, según Diéguez, en Presillas Bajas "hay un exceso de presión en la conexión que llega hasta el aljibe, lo que provoca que 'revienten tuberías de las casas y, cuando se cierran los contadores de paso de éstas, en la tubería general. Esto sucede desde que hace un año se comenzó a utilizar agua desalada".

Diéguez afirma que cuando se cambie toda la calzada, "la presión tendrá que salir necesariamente por las casas y volveremos a las inundaciones, porque entre la empresa y el Ayuntamiento no quieren pagar; la empresa se limita a arreglar y estos arreglos le han salido más caro que si lo hubiese cambiado todo de una vez".

Esto ha llevado a que únicamente queden 20 metros de tubería por sustituir según el ecologista, "después de los sucesivos arreglos practicados en la localidad, en la que se produce al menos una rotura a la semana".