El delegado territorial de Fomento y Vivienda en Almería, Joaquín Jiménez, se reunió ayer con el alcalde de Vícar, Antonio Bonilla, para darle a conocer la evolución de las obras para el refuerzo del firme en la A-1051, concretamente entre los puntos kilométricos 0 y 1,3, tramo que enlaza la A-7 con el acceso a Vícar y que posteriormente dará paso a la nueva variante de Roquetas de Mar hasta el centro comercial Gran Plaza. Jiménez informó al alcalde de que ya han finalizado las dos primeras fases de la obra y hoy concluirá la tercera, que dará por finalizados los trabajos.

Este tramo de la A-1051 da continuidad al tráfico hacia la nueva variante de Roquetas de Mar, donde a mediados de junio comenzarán las labores para la colocación de las vigas de la estructura en el enlace de Las Losas, ya que está previsto que la variante entre en servicio a finales de julio. Por este motivo, ha explicado Jiménez, "hemos determinado ejecutar las mejoras en los acceso a Vícar con anterioridad a la llegada del material y así evitar incidir aún más sobre la circulación".

"Todos los trabajos se han desarrollado sin incidencias y con la mínima afección al tráfico y a los usuarios posible", aseguró el delegado, que avanzó al alcalde los trabajos pendientes para hoy y que darán por finalizada la actuación. La última fase consistirá en la rehabilitación del firme en las dos calzadas comprendidas entre la glorieta del Viapark y el enlace del Parador de la Autovía del Mediterráneo (A-7). Esta fase se ejecutará en horario nocturno y comenzarán a partir de las diez y media de la noche, cuando el tráfico disminuye de manera considerable.

Este refuerzo de firme, que cuenta con un presupuesto de 170.000 euros y lo desarrolla la UTE Firmes Almería, se está realizando en época previa al verano para evitar afecciones al tráfico, especialmente en Roquetas donde su población, 90.000 habitantes, se triplica en los meses estivales.