Las calas y playas del parque natural de Cabo de Gata-Níjar son un lugar muy frecuentado en esta época de verano por muchos turistas y vecinos, que encuentran en estos espacios vírgenes un remanso de paz. Pero esta afluencia de visitantes conlleva que se produzcan aglomeraciones de coches y del tráfico rodado en esas playas vírgenes. Para poner fin a un trasiego de coches sin control al el Ayuntamiento de Níjar ha comenzado la ordenación del tráfico de vehículos en dos de las más emblemáticas playas nijareñas del Parque Natural, las del Playazo y Cala del Plomo.

Fue el pasado sábado cuando la concejalía de Turismo y Playas, que dirige Alexis Pineda, llevó a cabo un operativo de prueba para poner fin a la congestión y la falta de la mínima regulación en el acceso a estas dos calas.

La medida que en poco tiempo estará a pleno rendimiento se ha impulsado con el objetivo es regular el tráfico e impedir aparcamientos en caminos estrechos, que puedan suponer un riesgo para la seguridad en el acceso o desalojo de dichas playas.

Según han informado desde el Ayuntamiento, el operativo está coordinado por la Policía Local y Protección Civil, en colaboración con la Delegación de Medio Ambiente. El control de acceso tanto a la cala del Plomo como a la del Playazo se desarrollará los fines de semana hasta el final del mes de agosto.

El consistorio quiere tener un acceso rápido y directo a todo este tipo de playas y el concejal de Turismo, Patrimonio Cultural, Playas y Oficina de la Transparencia, Alexis Pineda, ha recordado que "es necesario organizar el tráfico en el acceso a estas playas, puesto que son muchos los visitantes que acuden a ellas y no es lógico no haya un ordenamiento; así como señalizar las zonas de estacionamiento prohibido".

Además, el concejal de Playas ha subrayado que "será un establecimiento gratuito, pero regulado. No se trata de recaudar dinero, sino de solucionar problemas como la accesibilidad, la convivencia de los visitantes y la agilidad del tráfico".

Desde el Ayuntamiento se quiere hacer hincapié en que este tipo de medidas persiguen mejorar la calidad de los servicios turísticos y de la atención en las playas, que son muchas y de gran valor, pero que han de estar coordinadas por un operativo que evite problemas y haga óptima la estancia de quienes las visitan.