Las poblaciones emiten gases de efecto invernadero principalmente debido a las actividades humanas. La quema de combustibles fósiles, tanto para la generación de energía como para el transporte, es una de las principales causas. Los vehículos motorizados, omnipresentes en áreas urbanas, son una fuente significativa de emisiones de dióxido de carbono (CO2) y otros contaminantes. Las industrias también desempeñan un papel importante. Procesos como la fabricación de cemento, acero y productos químicos liberan gases de efecto invernadero en grandes cantidades.

Además, la agricultura contribuye a estas emisiones a través de actividades como la gestión del suelo, la producción de alimentos y la gestión de residuos orgánicos. La gestión de residuos en sí misma puede generar metano, un gas de efecto invernadero aún más potente que el CO2. Estas emisiones, acumuladas a lo largo del tiempo, han llevado a un aumento en las concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera, exacerbando el problema del calentamiento global y el cambio climático.

Las áreas metropolitanas de Sevilla, Málaga y Córdoba, seguidas por Granada y Almería, encabezan la lista de zonas en Andalucía que expulsan más gases de efecto invernadero. Estas áreas, debido a su alta densidad de población, actividad industrial y dependencia del transporte basado en combustibles fósiles, generan significativas emisiones de gases de efecto invernadero.

En Almería, la capital emite más toneladas de CO2 equivalente que ningún otro punto de la provincia. Según el Mapa del Clima de Andalucía publicado por la Junta de Andalucía, durante los últimos años se ha emitido a la atmósfera un total de 650.000 toneladas de dióxido de carbono equivalentes anuales (tCO2 equiv).

Por lo tanto, es el cielo menos limpio de contaminación de toda la provincia de Almería y uno de los más perjudicados de la comunidad autónoma.

Le siguen El Ejido, con 397.000 tCO2 equiv al año y Roquetas de Mar con 255.000 tCO2 equiv.

En la quinta posición estaría Húercal Overa (138.000 tCO2 equiv) y Níjar con (126.000 tCO2 equiv). También se encuentran entre las zonas con más emisiones las localidades de Vícar (89.009), Pulpí (82.343), Cuevas del Almanzora (80.624), Carboneras (74.246), Adra (66.540), Vera (60.669), Albox (56.858), Huércal de Almería (49.814), Berja (48.779), Vélez-Rubio (47.769), Cantoria (43.569) o La Mojonera (37.671).

Los que menos contaminan

Y en el otro extremo, la zona que menos contamina de la provincia se encuentra en la Sierra de los Filabres, coincidiendo con su escasa población y actividad. El municipio que menos ‘tCO2 equiv’ expulsa es Benitagla, con 289 ‘tCO2 equiv’, seguida de Olula de Castro (679), Castro de Filabres (694), Suflí (828), LAroya (953), Armuña de Almanzora (1106), Bentarique (1129), Velefique (1298), Cóbdar (1558) o Chercos (1585).

Las Alpujarras almerienses le sigue en liza con municipios como Alicún (708), Alucía de Monteagud (726), Bayarque (848), Alsodux (890), Santa Cruz de Marchena (922), Rágol (936), Bayárcal (1296) o Padules (1580).

De entre estas, cabe destacar forman parte de las localidades con mayor población de la provincia salvo Cantoria, aunque en el municipio destaca su importante actividad industrial. En otros, como en los del Poniente, prima una actividad relacionada con la agricultura.