La Guardia Civil ha hecho balance del dispositivo de seguridad llevado a cabo el pasado fin de semana con motivo de la fiesta de Moros y Cristianos, que tenía como principal objetivo disuadir del empleo de bebidas alcohólicas y estupefacientes al volante.

Como resultado del dispositivo llevado a cabo, la Guardia Civil ha controlado un total de 1.282 vehículos, de los cuales, 51 conductores han arrojado resultado positivo en alcohol, siendo 50 de ellos denunciados por los agentes ante la Jefatura Provincial de Tráfico de Almería, así como uno de estos es investigado al conducir bajo influencia de bebidas alcohólicas y arrojar en la prueba de alcoholemia realizada, 0'83 miligramos de alcohol por litro de aire expirado, lo que supone superar en más de 3 veces la máxima permitida.

De la misma manera, identificaron a otros seis conductores con la presencia de estupefacientes en el organismo, siendo la sustancia más común el cannabis, si bien algunos lo hacían con cocaína y anfetamina.

Igualmente agentes de Garrucha, durante las fiestas han identificado a 80 personas, de las cuales cuatro han sido detenidos por diferentes delitos contra la salud pública, un delito de quebrantamiento de condena y un delito de violencia de género.